"Te amo como se aman ciertas cosas oscuras, secretamente, entre la sombra y el alma"
Pablo Neruda
Despertó con un dolor agudo que se extendía desde la punta de sus dedos hasta su última neurona, no estaba en su casa o en la enfermería de la escuela, se encontraba en una cama de por lo menos dos metros de ancho; tapado hasta los dientes por un edredón de color gris oscuro, la noche envolvía a la ciudad entre sus fríos brazos, el silencio gobernaba sobre todo, un gran ventanal se levantaba frente a el, dejando a la vista todas las luces diminutas que se asemejaban a miles de estrellas, cierta emoción lo invadía, era hermosa la vista.
Mágico
Fue lo que pensó, se había levantado de la cama con delicadeza, sus pies tocaron el piso suavemente y no le impresionó estar con una gran camisa negra, su uniforme lo encontró en una silla, doblado y limpio.
- ¿Es hermoso no? - Dijo una voz a sus espaldas, grave y suave.
Solo asintió, no emitió palabra o sonido alguno al contemplar por el cristal, no duró mucho el silencio cuando otra persona se posó a su lado y con el miedo de su pecho incremento decidió encarar al hombre, soltando todo oxígeno existente cuando se encontró con un par de ojos esmeraldas, lo cuales lo veían con ternura, algo en su pecho de removió.
- ¿Quién eres? - La pregunta salió sola, sin su consentimiento, como una dulce brisa en los días de otoño, sin avisar.
Pero no recibió respuesta, solo un lento parpadeo de su parte cuando un brillo de asentó en sus orbes cristalinos, no sabe cuánto duraron de ese modo pero tampoco le importaba.
- ¿Cuál es tu nombre? -Preguntó de nuevo, más no recibió respuesta.
Luego de unos segundos su cuerpo comenzó a pesar, se sentía tan cansado como si hubiera corrido alrededor de una cancha de fútbol Americano durante tres horas, sus párpados parecían tener un peso extra y sus piernas temblaban como las hojas apunto de caer de un anaranjado árbol el veinte de Noviembre, una suave música sonaba de fondo y la persona frente a él se acercaba lentamente.
- Mi nombre es Taehyung - Respondió a la vez que tomaba entre sus brazos el cuerpo del chico que se desvaneció- Kim Taehyung ..
- M-Me suena ... tú nombre - Lo hacía, lo había escuchado en otro lugar.
Y se durmió, se quedó dormido en los brazos de un desconocido por segunda vez, bueno, se quedo dormido en los brazos del mismo desconocido, el cual lo llevó de nuevo a la cómoda cama donde le dejó suavemente, después que recostó a su lado observando cada una de sus facciones, desde sus largas pestañas hasta su perfilada nariz, luego sus rojizos labios, los cuales le llamaban a morderlos y lamerlos, más se detuvo a medio camino, sus respiraciones volviéndose una, su corazón agrietándose cuando una suave lágrima surcó las rosadas y regordetas mejillas del pequeño quien entre susurros decía su nombre, casi esperando recibir respuesta alguna.