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ɐʇıɔ ‾ ‾ ‾✐

El sábado había llegado

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El sábado había llegado.

Los rayos del sol se colaban por la ventana de su habitación, haciendo despertar al ruso. Este miró la hora y día de su móvil, inconscientemente sonrió al ver que era sábado, el día de su cita con Horacio.

Sin prisa –ya que hoy era su día de descanso– se levantó de sus suaves y blancas sábanas, entró al cuarto de baño, abrió las llaves de la bañera y se metió dentro de ella. Haciendo que su cuerpo –el cual estaba decorado por muchas cicatrices – se relajase por fin.

Cuando salió de la ducha, fue a su habitación para cambiarse, se puso una ropa un poco elegante y fue a la cocina a prepararse un café.

Greco había llegado para ayudar a su amigo a alistar la comida y donde se daría. Estando ya listo todo, el barbudo se largo de allí no si antes deseándole suerte a su compañero.

"Ahora toca esperar a Horacio" pensó para irse a sentar en el sillón mientras le brindaba suaves caricias a su gata.

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Tres horas habían pasado, el chico moreno no se aparecía por ningún sitio. Volkov se desanimó un poco, pero recordó que no habían acordado la hora, así que le tocó un otra vez esperar.

Dos horas habían pasaron, ya eran las 10:30 y Horacio no había llegado. Resignado se levanta del sofá, toma su móvil y se va al comedor. Tenía que limpiar todo.
Cuando estuvo de guardar la comida unos golpeteos en la puerta lo sacaron de sus pensamientos depresivos.

Con mucha pereza abrió la puerta topándose con Horacio, se veía hermoso -aunque en los ojos del ruso todo los días se veía hermoso- y atrás de él se encontraba un chico moreno y ojos similar a un cristal. El ruso se quedó atontado al ver lo atractivo que era este.

El de cresta Tosió falsamente sacándolo de sus pensamientos, y con una sonrisa un tanto incómoda los presento.

—Claudio, él es Volkov— con un "priviet" el último mencionado le extendió la mano —y Volkov, él es Claudio...—

—Su novio— terminó su frase también extendió la mano apretándola suavemente con una sonrisa en la cara.

—Su novio— terminó su frase también extendió la mano apretándola suavemente con una sonrisa en la cara

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Capítulo un poco caca y rápido para que vean que esta historia sigue en pie.

Y tengo que pedir perdón porque lo hice teniendo mucho sueño y 0 inspiración.

☹;; 𝐜𝐚𝐦𝐛𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐩𝐚𝐩𝐞𝐥𝐞𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora