Shoto era un alumno ejemplar, siempre llegaba a clases temprano, entregaba los trabajos a tiempo, era bueno con los profesores.
Nunca nadie hubiera imaginado que detrás de ese educado joven había un chico alocado que amaba las fiestas y disfrutaba e...
Amaba esos días,ya que al salir de el edificio el cual era su academia, podía dejar esa estupida actitud de niño bueno–la cual se veía obligado a tener gracias a su padre– y ser quien realmente era.
Estaba harto de fingir que sus compañeros le caían bien, harto de tratar bien a sus profesores solo porque eran mayores a el, harto de todas esas malditas tareas y examenes.
Necesitaba urgentemente ir a alguna fiesta, tomar un poco de alcohol y tal vez tener una ronda rápida de sexo con algún tipo.
Cuanto extrañaba todo eso...
Gracias a su "querido padre" hace tres semanas que no podía ir de fiesta.
Y todo por su maldita obsesión con que el sea el mejor.
Si ni siquiera su mismo padre pudo serlo ¿Como esperaba que el si?
Maldiciendo a su padre por lo bajo abrió la puerta del lugar en el cual seria la fiesta, al entrar un montón de luces de colores parpadeantes hicieron que cerrara los ojos por unos segundos y el olor a alcohol inundó sus fosas nasales.
Se acerco a donde estaban las bebidas pidiendo un vaso de cerveza.
Sonrió aliviado al sentir el liquido pasando por su garganta.
Estaba por pedir más, pero sus ojos instantaneamente se posaron sobre el otro lado del lugar, viendo a alguien en especifico.
Oh no...
¿Que carajo hacía el ahí?
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Sus ojos fueron abriéndose lentamente viendo todo a su alrededor.
Su cabeza dolía como el demonio y sentía que no podía moverse, como si un camión le hubiera pasado encima.
No tardo en darse cuenta que el lugar en el que estaba no le resultaba conocido.
Demonios ¿Ahora donde estaba?
Bostezo tratando de despertarse para luego ver a su alrededor.
Observo el lugar, el cual parecía ser un pequeño apartamento, no había nada más que una mesa, una ventana y un pequeño espacio con un microondas.
Miro hacía la cama, que poseía unas hermosas sabanas color blanco, dirigió su vista hacía su costado para ver si había alguien a su lado.
Entonces lo vio...
—¿¡QUE MIERDA?!—
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¡Holanda lector desconocido! ♡
Ya se que debería actualizar mis otras historias, pero hace mucho que quería escribir una historia de este tipo xd
Probablemente esto no tenga más de cinco o seis capítulos, pero de todos modos espero que les guste.
