Letters to us || l.s || 2da temporada

Elecciones.

Capítulo 18.-

-Besé a Harry.

-¿Qué?.-Bajo la mirada.-¿Qué has dicho?

-Y-Yo no quise...

-¿Qué? ¿Besarlo?.-Contesta con rabia. Se acerca a mi en tres pasos. Y mis ojos se llenan de lágrimas.

-Lo siento.-Sollozo.

-Pues yo también.-Me responde.-Siento haberte conocido, haberte entregado mi tiempo y todo de mi, lamento haberte dado mi confianza y presentarte a mi familia. Y lamento haberme enamorado de ti.-Mi corazón se detiene. ¿Qué he hecho?

-Cam...

-¿Y sabes qué es lo peor?.-Dice dándome la espalda.-Que creí que trayéndote a conocer a mi familia te darías cuenta de todo lo que eras para mi.

-Solo puedo imaginarlo.-Digo en un susurro. Él voltea a verme con el ceño fruncido.

-¿Y que, exactamente, significa eso?

-No tiene...

-Por una vez en tu vida, dime la verdad.-Suspiro y bajo la mirada de nuevo.

-No te dije todo acerca de cómo conocí a Aaron.-Rasco mi ojo limpiando la lágrima que estaba a punto de caer.

""Hay niños corriendo por todos lados, muevo los dedos con inquietud y con rápidez corro hacia las únicas personas que conozco.

-Hey, Louis. Ahí estás.-Me llama Stan, mi amigo desde primer grado.-Estamos a punto de empezar a jugar, ¿Entras?

-¿Por qué no?.-Digo encogiéndome de hombros. Stan gira la botella de plástico en medio de nosotros. La punta queda enfrente de mí y maldigo mi mala suerte.

-Louis...-Susurra Aaron.-¿Verdad o reto?

-Reto.-Respondo.

-Besa a la persona que te guste ahora.-Volteo a ver a mi alrededor. Hannah sonríe con emoción cuando volteo a verla. Me acerco caminando y paro donde está Aaron y beso su mejilla. El círculo se queda en silencio unos segundos antes de que las risas de todos empiecen.

Miro a Aaron, sus ojos se ven confundidos antes de que su puño de a parar en mi mejilla. Alcanzo a ver a Stan asustado. Gritando desesperado por ayuda, Aaron aún está encima de mí golpeándome con la fuerza que un niño tiene.

La señorita Pilgrim lo separa de mi y ni siquiera puedo moverme con el dolor en todo mi cuerpo. Tan solo escucho. Y lo que escucho no suena lindo.

No es algo que un niño de 12 años debería escuchar.

No es algo que un niño de 12 años debería sentir.

No es algo que un niño de 12 años debería vivir.

-¡Estúpido gay! Me das asco.

Y eso es todo.

Esa es toda mi vida.""

-¿Estás culpando a mi hermano de esto?

-No, Cam. Pero él...

-Fuera de aquí.-Me corta, sin verme.

-Cameron...

-Sal de aquí ahora mismo o haré que te saquen.-Las lágrimas no dejan de caer, y lo peor de todo, es que yo soy realmente el único culpable. Comienzo a caminar pero me detengo.

-No.-Le digo.-No voy a irme.

-¡Maldición, Louis!-Grita y me encojo en mi lugar.-Quiero estar solo, ¿Qué tan difícil es entenderlo?

-No es difícil.-Respondo.-Lo entiendo.

-¿Entonces, por qué sigues aquí?.-Me dice con enojo.

-Porque tú nunca te fuiste.-Respondo.-Nunca te diste por vencido conmigo.-Sonríe sin una gota de gracia.

-Quizás ese fue mi mayor error. Debí de haberte dejado, debí de alejarme cuando todavía podía.

-Sí.-Admito.-Pero no lo hiciste. Y yo tampoco lo voy a hacer, tampoco pretendo torturarte con mi presencia a diario. Me pediste que fuera sincero contigo, así que te lo diré todo, creeme, Cam. Yo siempre te puse primero. Siempre pensé en ti, en tus sentimientos y en la forma en la que me tratabas y te preocupabas por mi. ¿Sabes de qué me arrepiento yo?

-¿De qué?.-Pregunta timidamente pateando el césped como un niño pequeño.

-De no haberte conocido primero.-Le respondo.-Harry apareció en mi vida cuando más necesitaba a alguien. Tú apareciste cuando más me sentía solo. Y no pretendo que lo comprendas, pero él tiene un espacio en mi que nadie nunca le va a poder quitar.

-Creí que no me torturarías.-Me recuerda.

-Solo quería que supieras que, ahora tú también tienes un espacio.-Me voltea a ver.

-¿Y qué significa eso?

-No lo sé.-Digo.-Eso estoy tratando de averiguar.-Y estoy siendo sincero. Harry y Cam ambos son tan diferentes, pero a la vez son las partes que me complementan. Una era más grande que la otra, lo sabía. Pero no podía ignorar a la otra parte. Él suspira y besa mi frente.

-Perdón.-Susurra.-Pero yo no puedo esperar.-Quita un mechón de pelo que cae por mi frente.-Es él... O yo.-Trago duro. Las siguientes palabras fueron seguramente las más difíciles que logré pronunciar. Pero fueron sin pensar, mi decisión se basaba en hacerlo sin pensar. Pues dejaba de hablar mi cerebro y lo hacía mi corazón. Así que sin temor alguno, pronuncié:

-Es él.-Trago.-Siempre ha sido él.

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N/A: Les dije que en algun momento tendría sentido.

Muchos besos y amor,

-Ann.