Salvaje

Nacimiento

El regreso de la expedición en la que salió el líder junto su pareja les resulto sorprendente, no solo por el hecho de ver a la pequeña bola de pelos rubios balancearse entre los colmillos del Omega embarazado, sino porque buscaban a un omega que pudiera alimentarlo durante las semanas de gestación que le faltaba a SeokJin. Como NamJoon lo esperaba fue más difícil de lo que creía Jin, por el simple hecho que ningún alfa dejaría que un cachorro que no fuera suyo estuviera con sus hijos.

La tristeza había invadido a Jin al ver al pobre cachorro chillar y buscar a tientas un poco de comida cerca de él. Se negaba rotundamente a verlo morir por inanición y cuando creía que ya no podía hacer nada más Wooseok apareció con E'dawn, siendo arrastrado por este. Le rogaba que pensara las cosas pues su instinto se negaba sin embargo Wooseok le debía una a Jin y estaría encantado de hacerlo. Wooseok no olvidaría el valor que le dio Jin al momento en que sus bebés llegaran al mundo y el repentino miedo de que las cosas pudieran salir mal o que pudiera lastimar a sus bebés cuando tuviera que moverlos de lugar, pero Jin le enseño todo lo que tenia que saber y lo apoyo más que nunca.

El pequeño pudo recobrar las fuerzas perdidas, aunque si lo comparabas con otros cachorros de su edad él era diminuto a su lado. Los tres cachorros de Jin estaban más que encantados con él pequeño y entusiasmados con la idea de que tuvieron un hermano más pronto.

El pequeño rubio aun no tenia un nombre por supuesto que Jin y NamJoon se desvelaban hablando de las posibilidades de nombre que le gustaban, sin embargo, nunca llegaban a un acuerdo y su bebé se hacia presente en las platicas nocturnas de sus padres opinando sobre los nombres con pequeños empujones en el vientre de su madre que lo regañaba.

La noche era especialmente hermosa ese día, hacia frio pero sin llegar a calar, la luna estaba en lo mas alto siendo ligeramente cubierta por unas cuantas nubes que se deslizaban sobre ella y las estrellas relucían con su brillo más que otros días.

Jin miraba el cielo esperando que sus hijos terminaran de jugar y perseguirse junto con los cachorros de Jackson, quien había salido junto con Namjoon a mirar el alrededor para poder descansar y el cachorro rubio descasaba en un pequeño nido improvisado muy cerca de él para vigilarlo la mayor parte del tiempo.

Decidió estirar un poco sus piernas cambiando de forma. Hacia bastante tiempo que no tomaba su forma humana por la constante molestia que le causaba el embarazo. Lo primero que noto cuando cambio fue lo largo de se encontraba su cabello y lo brilloso que estaba, sus manos picaban por tocar su redondo vientre bajo las telas, con cuidado trato de sentarse sobre el piso cuando de repente sintió un agudo pinchazo en toda su espalda baja que lo doblo en su lugar en ese momento recordó las palabras que el mismo se había dicho después de tener a sus bebés. "Ni creas que tendremos más cachorros después de esto"

-Demonios-susurro -Duele-

Era la hora y NamJoon no estaba cerca y tampoco quería volver a pasar por eso estando solo, aunque solo fuera por unos minutos. Aterrado por el dolor se deslizo por las paredes, su instinto le gritaba que regresara a la seguridad de su Nido y esperara por Nam, pero se sentía tan asustado que no podía dar ni un paso más mientras las lágrimas comenzaban a recorrerle el rostro.

Yesung se canso de que sus hermanos lo hicieran a un lado por ser un poco cobarde a lo cual regreso al cubil para poder delatarlos con su madre y que Yesung se cansó de que sus hermanos lo molestaran por ser un poco miedoso y no pudiera hacer las mismas cosas que ellos así que los delataría con su madre para que fueran regañados. Entro al cubil restregándose sus ojos intentando quitarse las lágrimas.

-Mamá. Han y JinJin de nuevo son malos conmi...-su brillosos y acuosos ojos lo vieron recargado sosteniendo su vientre en sus manos -¡Mamá! ¿Estas bien?-