capitulo 3

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Pov. ___
—mierda, mierda, mierda, maldito Tokoyami le dije que me hablara— me encontraba corriendo desde los dormitorios a la academia.

Me había quedado dormida todo por terminar una serie que me encantaba, digo ¿Quién no se ha quedado alguna vez hasta las 5am por ver una serie que le gusta?

Me estaba regañando a mi misma por hacerlo, apenas tenia tiempo para poder cambiarme los zapatos pero para cuando lo hice aún quedaban 2 min para las clases y empecé a correr por los pasillos.

¿Podría tener más mala suerte? Al parecer si porque el timbre sonó y los pasillos se acumularon un montón de estudiantes, hoy no es mi día.

Pov. Tamaki 

___ no llego... quizás esta enferma o algo, Mirio y Nejire se adelantaron mientras que yo me había quedado cabeza contra los casilleros esperándola pero nada.

Me encontraba de camino a mi clase, la aglomeración de gente no me importaba ya que hoy no la había visto y estaba un poco decaído, quizás ya no quería mis cartas y por eso no se aparecía por ahí pero no... eso seria tonto ya que de igual manera se tendría que cambiar el calzado.

Estaba sumergiendo en mis pensamientos cuando la vi, se veía tan brillante abriéndose paso siendo ayudada por los hombros de los demás estudiantes dando pequeños saltitos disculpándose con todo al que usaba como apoyo aunque algunos ni se percataron de su rose, no podía creer lo habilidosa que podía llegar a ser.

Las clases transcurrieron normal aunque me quede con la duda ¿ella habría tomado la carta que le deje esta mañana? la hora del almuerzo había llegado y como todos los días Mirio me llevaba a la rastras junto con Nejire para ir al comedor.

—oye, casi que no llegas hoy—la conversación de la mesa detrás de nosotros capto mi atención— me quede dormida Katsuki—era ella—oye peque, esta tarde iremos a entrenar ¿te unes?—¿peque... ? hablo una voz masculina diferente a la primera—no puedo, hoy empezare a ir al taller—¿al taller? Quizás debía hacer cambios en su traje— ooh vamos solo será entrenamiento sencillo—reprocho otra vez el chico—cállate pelos de mierda, no vez que para esta también es entrenamiento.

Mi atención a la conversación disminuyo ¿estar en el taller también es parte de su entrenamiento? el almuerzo termino y después de un tiempo las clases también.

Por curiosidad pase por el taller, casi siempre la puerta de este estaba abierta y no se quizás la vea... cuando cruce por el lugar desde el pasillo podía ver que estaba leyendo mi carta, rápidamente por la vergüenza apresure el paso pero me tope con Mirio que al parecer me estaba buscando.

—Tamaki aquí estas, te buscaba para irnos a casa, oh! Hola Yagami-san—mi cuerpo se estremeció, ella estaba detrás de mí— senpais... hola-no podía darme vuelta por los nervios y rogaba por que pasara de largo.

—¿que llevas allí? ¿Te ayudamos?— ¿ayudarla? decidí darme vuelta y la vi, estaba con unos cajones llenos de piezas de metal que a simple vista se veían pesados- son piezas para fundición pero estoy bien no quisiera ser una molestia para ambos.

—tranquila que clase de senpais seriamos si no te ayudamos—dijo mientras tomaba uno de los cajones a lo que por instinto imite su acción—oh, se los agradezco muchísimo por favor síganme— tomo camino posicionándose a nuestro lado.

—¿a donde nos dirigimos?— le pregunto Mirio, sinceramente yo me preguntaba lo mismo— al taller de armas esta en el subsuelo de la academia.

—¿Taller de armas...?— dije en voz baja creyendo que no me había escuchado—si—dijo mientras bajamos al subsuelo—en este taller se suelen forjar armas o piezas para artefactos donde se terminan por ensamblar en el taller principal.

—bueno es aquí—dijo en frente de una puerta negra enorme y seguido de eso dejamos las cajas en el suelo al lado de ella—en verdad se los agradezco muchísimo—nos dijo haciendo una pequeña reverencia finalizando con una sonrisa... hasta aquí llegue... pensé antes de desmayarme, como no hacerlo eran tan pocas las veces que la veía sonreír y ahora lo estaba haciendo justo en frente de mi.

Bonus:

Pov. ___ 

Estaba en el taller apunto de leer la carta del anónimo de estos días pero vi a Tamaki-sempai pasar por el pasillo, rápidamente guarde la carta y tome las cosas para ir al otro taller.

No me malentiendan solo quería cruzarme con él nunca pensé que me ayudaría a traer las cosas con su compañero, me sentía tan feliz intercambiando unas cuantas palabras con él.

Cuando llegamos al taller les agradecí y Tamaki se desmayo, me preocupe muchísimo—¡¿s-sempai que le paso?!—le pregunte a Mirio—no te preocupes, hoy entrenamos demasiado y quizás se sobre esforzó, lo llevare con recobery-girl, tu tranquila—lo tomo como un saco de papas para luego perderlo de vista.

Me sentía algo culpable pero me termine cambiando por algo más cómodo, específicamente unos pantalones cargo de trabajo y una remera de tirantes negra, amarre mi cabello pero antes de hacer cualquier cosa leí la carta.

_____

Hola, no sabia que te gustara la bebida de limón, no soy un acosador ni nada por favor no pienses eso solo te vi cuando iba de camino a la maquina.

La verdad a mi también me gusta mucho, tanto como el takoyaki.

Ahora que lo pienso supongo que tu serias como un limón.

Ya sabes para algunos puedes ser acida gracias a tu seriedad pero el limón también puede ser dulce, como en un postre.

Si tuviera que compararte con uno supongo que seria con un pie de limón ya que su acidez y dulzura se complementan entre si como lo haces tu.

Siempre suelo comparar a las personas con comida... perdón si puede llegar a sonar raro.

-tu tímido senpai
_____

Solté una pequeña risa, nunca me habían comparado con un postre pero la forma en la que él lo hacia era adorable, guarde la carta y continúe con mis tareas en el taller.

[Como dije en mi otra historia, estaré actualizando seguido aprovechando de que ni tengo trabajos de la universidad por el momento y por si no se entendió, nuestra rayis forja sus propias armas.
Perdón si esta medio largo el capitulo xd en fin, tengan un buen día <3]

¿Que tan mala eres? [Tamaki x tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora