Lección dos - Beso a la Francesa

7K 470 126
                                    

Su primera lección oficial ocurrió dos días luego de que Hermione se ofreciera a enseñarle, la cual era lamentablemente la única noche a la semana que no tenía deberes de prefecta. Se encontraron en el Salón de Requerimientos a la medianoche, sabiendo como serían los rumores si eran atrapados juntos haciendo lo que iban a hacer.

Hermione ya estaba allí cuando Harry, sudoroso y aterrorizado, llegó.

Ella había convertido el cuarto en un tipo de alcoba, para el asombro y horror de Harry, y no podía hacer nada más que exhalar cuando ella se sentó en la cama, pareciendo como si estuviera tratando de no reírse de él.

"¿H-Hermione? ¿Para que necesitamos una – una – una cama?"

Ella levantó en un divertido, Sabelotodo una pequeña ceja a él. "Porque," dijo ella en su típico tono no-es-obvio, "necesitaras saber como besar sentado, parado, y acostado. Quiero decir, no puedes solo aprender a darle a una chica un simple beso y dejarlo ahí. No si planeas realmente besuquearla."

Harry la miro fijamente, rojo como un tomate. Cuando ella le ofreció ayudarle a practicar a besar, no tenía idea que planeaba enseñarle como salir con una chica! La horrorosa verdad de la situación comenzó a hundirse en Harry – esto iba a ser vergonzoso mas allá de lo que creía.

Hermione rió aparentemente apacible, instándole de alguna forma y golpeando el lugar en la cama a su lado. "Ven aquí, Harry. No hay nada de que temer – soy solo yo."

Harry pensó que ella estaba fuera de sus cabales. ¿Nada de que temer? Esto era la cosa más aterradora en la que ella podría posiblemente ponerlo.

"Harry, francamente, ven aquí. Es solo una cama. Las camas son usadas para dormir. Saca tu mente del canal."

Harry se sonrojó aun más, lo cual no creía posible, y vacilantemente se sentó a su lado. Ella acaricio su rodilla – haciéndolo saltar – e hizo rodar sus ojos.

"Va a tener que estar más relajado si esto va a funcionar," dijo ella mientras cesaba su caricia y apretaba su rodilla en lugar. Harry soltó un pequeño, parecido al chillido de un ratón. "Ahora, voy a – no saltes – voy a poner mis brazos alrededor tuyo. ¿De acuerdo?"

Oh, si, la sensación de sus manos en su espalda estaba definitivamente muy bien. "Bien."

"Ahora coloca una mano alrededor de mi cintura – si, justo así – y coloca la otra en mi cuello. …Un poco más alto… Perfecto."

"¿Yo – um – te besó ahora?" preguntó Harry.

"Si," replico ella pacientemente. "Adelante."

Harry se inclino hacia delante, su impaciencia combatiendo con su titubeo. Allí, se suponía que debía haber algo muy incorrecto con besar a uno de sus mejores amigos del sexo opuesto, Harry sabía, pero sus labios estaban llenos, suaves y rosados, y quería demasiado el sentirlos otra vez. Y esto era su idea, después de todo.

Hermione suspiro suavemente cuando Harry la besó, el pequeño resoplido de aire hacía los labios de Harry estremecerse, y se preguntó porque ella hacía eso. ¿Era un suspiro de exasperación? ¿Desilusión? ¿Satisfacción? ¿…Felicidad?

Harry apretó sus brazos alrededor de ella y la besó más rudo. ¿Por qué, oh por qué, tenían que ser las chicas tan increíblemente confusas? Era demasiado molesto!

Justo cuando Harry comenzaba a perdonar a Hermione por ser una chica – los besos de ella no sería aproximadamente tan agradable de otra forma – sintió algo húmedo presionado contra sus labios y se tiró atrás en sorpresa.

"¿Qué fue eso?" preguntó, casi histéricamente.

Hermione hizo rodar sus ojos. "Era solo mi lengua, Harry."

"Oh." Hermione trato de poner su lengua en mi boca. Oh, Merlín.

"Trata otra vez," Hermione le instruyo, "y esta vez no te alejes cuando sientas mi lengua. Solo abre un poco tu boca."

Harry asintió e hizo lo que le dijo, más bien anticipando ansiosamente lo que estaba por venir, aunque él nunca se lo admitiera. Sus labios calidos presionados nuevamente contra los suyos por un efímero momento antes de que su lengua incitara a sus labios y abrió su boca como ella le había indicado. Las hormonas de Harry hicieron una pequeña regocijada cuando ella presiono su cuerpo más cerca y su lengua se deslizo contra la suya – y entonces se dio cuenta que no tenía una maldita pista de que hacer luego.

"¿Uh – huh – Hermione?" dijo Harry cuando finalmente logro separarse a si mismo de ella.

"¿Qué pasa, Harry?" preguntó un poco impaciente. "Lo estabas haciendo bien."

"¿Pero que hago una vez que dejo pasar un poco la lengua?" preguntó desesperadamente.

Hermione sacudió su cabeza en una manera exasperada. "Oh, Harry. No puedes tramar cada pequeño etapa de un beso. No es una cosa paso-a-paso! Debes de…de improvisar, hacer lo que se siente correcto en el momento. Y una vez que tu lengua esta en la boca de una chica, solamente no la dejas ahí – tu…exploras."

Con un suspiro Harry volvió a removerse contra la cama. "Es demasiado complicado."

Hermione acaricio su brazo de modo tranquilizador. "No lo es realmente, Harry. Conseguirás manejar las cosas, con la suficiente práctica. Solo deja de preocuparte en hacerlo bien y has lo que se siente correcto," dijo ella, sonriéndole gentilmente en una forma que hizo a su corazón sacudirse. Y entonces esto realmente lo golpeo.

¡Él había estado besando a Hermione. Él había besado a Hermione, y no se había sentido como suponía – no se había sentido extraño en absoluto! Más bien, se sintió completamente, increíblemente normal. No…perfecto.

¿Ella quería que él hiciera lo que se sentía correcto, he? Bueno, eso implicaría besar a Hermione. Otra vez. Y otra vez.

"¿Porque no nos citamos una noche? Estoy libre el sábado a la noche. Podemos encontrarnos entonces," sugirió Hermione. Harry, un poco desilusionado de que estuviera terminando tan pronto, se obligó a estar de acuerdo.

"De acuerdo. El sábado."

Hermione lo beso en la mejilla (demorando un poco más de lo que debía para ser un amigo, Harry pensó con algo de esperanza) y lo dejo solo en la habitación.

Harry suspiro, su mente en un lío borroso, contento, confuso, y de una extraña manera feliz.

lecciones de besos para el principianteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora