Park Jimin | YoonMin

III. Park Jimin

Tan pronto acabo la semana todas sus pertenecías estaban acomodadas en sus respectivo lugar, acostumbrarse a la soledad en esa casa resultaba bastante complicada. Estaba tan apegado a su rutina con Yoongi. En este momento todo parecía muy lejano, el olor del café, el suave sonido de la ducha y el traje tendido a su lado.

Armaría su propia rutia, sin él.

Empujo el carrito de comprar a través de los pasillos, estos últimos días había empezado a comer un poco más, algo que había pasado tan desapercibido antes pero ahora no.

Miro los estantes, y allí estaba la caja roja de cereal.

‒Deja Minnie, yo lo bajo por ti ‒Yoongi a largo su brazo, y bajo dos cajas de una vez las coloco sobre el carrito. Rodeo con sus manos la cintura de Jimin.

‒No te hagas el tan alto, apenas son cinco centímetros ‒ Jimin giro un poco su cabeza para mirarlo mal.

‒Lo siento Minnie, pero cinco centímetros son cinco centímetros ‒. El pálido beso su mejilla varias veces y siguieron a avanzando por el pasillo.

Negó con la cabeza, se habían acoplado perfectamente los dos que ahora se sentía muy solo.

‒Le ayudo.

Frente a él había un chico de una sonrisa infantil, tendiéndole una de la cajas de cereal de las amarillas con una ave sonriente, no era la que quería pero igual no dijo nada y la tomo.

‒Gracias.

Empujo el carrito esta vez buscando la caja, si se entretenía más terminaría con más tarros de chocolate de lo que ya había agarrado antes.

‒El tiempo para a nuestro alrededor...‒Tarareo.

Cargaba dos bolsas en sus manos, la metió en el maletero.

‒YoonGi, Yoongi, ven y ayúdame con el niño‒ levanto la cabeza, aunque sonara idiota necesitaba verlo, preguntarle qué había pasado con ellos que es lo que faltó.

Pocos segundos después se dio cuentas de las palabras que habían venido acompañadas del nombre.

Ayúdame

Ayúdame con el niño.

¿Un niño?

¿Un bebé?

Eso era lo que faltó.

Pero había miles de Yoongi.

Debía asegurarse que era no era su Min Yoongi.

No era él ¿Verdad?

Pronto reconoció, la cabellera castaña, la chaqueta negra, era él, con un nudo en la cargante espero a que este girara.

El mundo era una mierda verdad, miles de lugares en el planeta y precisamente tenían que encontrarse aquí.

Una mujer de cabellera castaña casi de un rubio se le acerco a Min, con un bebé en brazos uno muy pequeño de mantita amarilla con patitos, era la misma que habían comprado hace tres meses en una de las tiendas del centro comercial, se la había dado a ella, era por eso que no la encontró entre sus cosas.

Era...

Aguantó la respiración como eso de alguna manera detuviera las lágrimas.

Yoongi tomo al bebe en brazos lo acerco a su pecho y dejo unos picos en la frente de bebé.

Suficiente había tenido suficiente, prendió el motor del carro, y salió de allí.

Pero la salida del supermercado estaba siendo acaparada por un vehículo, evitando su salida rápida.

Como un masoquista miro por el retrovisor, atravesó de ese pequeño pudo ver directamente al rostro a Min Yoongi, no estaba seguro de que él lo fuera a reconocer pronto el carro de enfrente salió, el hizo lo mismo.

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‒ChanYeol ‒Sabía que su voz se escuchaba quebrada pero él era su hermano, su pilar.

‒Jimin estas bien ‒negó con la cabeza, Jimin sabía que su hermano no lo podía ver pero aún así el lazo de gemelos los une. ‒No lo estas dime. Jimin, ¿Qué pasa? Dime.

Lloro.

Lloro porque no había llorado antes.

‒Voy para allá.

Pudieron ser veinte o treinta minutos en lo que ChanYeol había tardado en llegar, en sus manos traía dos cajas de pizza, dos botellas de dos litros de Coca-Cola y en la otra mano una bolsa negra.

‒Dame un momento Minnie ‒trotando dejo la bolsa negra en la cocina. ‒Ahora me diras porque cambiaste de casa..., porque lloras Minnie‒se podía palpar la preocupación la voz de ChanYeol.

‒Yoongi... Estoy embarazado ‒ su hermano sonrió, el gemelo mayor sonrió.

‒Minnie, eso es para estar feliz, mi pequeño hermano doncel esta embarazado ‒las manos frías de Yeol se pegaron en sus mejillas y con sus pulgares limpiaron su lágrimas. ‒Dime tu y Yoongi deben estar feliz, es lo que han estado buscando todo este tiempo.

Aun con las manos de su hermano en su rostro, negó.

El mayor de los dos lo miro atento, era la decisión de su hermano.

‒ ¿Y de cuantos meses estas? ‒bajo sus manos para abrazar el pequeño cuerpo de su hermanos, hasta pegarlo a su pecho.

‒Seis meses

‒ ¡Seis Meses! Por qué no me habías dicho antes. Minnie eso no se hace ‒imito una voz aniñada en a lo último, mientras picaba las costillas de su hermano hasta sacarle pequeñas y tiernas risitas.

‒Hace unos días me entere ‒. Hizo un pequeño puchero. ‒Pastelito de arroz, se ocultó durante estos meses, pastelito de arroz quería ser un linda sorpresa ‒esta vez se permitió quebrarse en los brazos de su hermano.

‒Y Yoongi donde está, debería estar aquí contigo, por lo que veo solo están tu cosas aquí, dime es por eso que me llamaste mientras llorabas.

‒Yoongi, me pidió el divorcio, me mude porque no quería estar, se que Yoongi quería tener un bebé y yo no podía dárselo en ese momento hoy por la tarde lo mire cargando un bebé, sabes lo mire con la misma ropita que compramos.

ChanYeol, no dijo nada, no podía decir nada, la situación lo había dejados sin palabras ese maldito bastardo.

Abrazo a su hermano lo más que pudo, sabía que dejar a su pequeño en las manos de ese escuálido estaba mal, pero lo había hecho porque era la felicidad de su hermano, en cuanto más tiempo juntos estaban más feliz lo veía.

Ese pálido se las vería con él.

‒Yo te apoyare, yo te ayudare en todo lo que pueda. Yo estaré aquí para ti Minnie

181020