Mensajeando con un desconocido

CAPITULO 12

Una vez que llegó a Mariana cerca del casillero, Lucia dejó todos los libros adentro, preparándose para ir a almorzar. Su amiga no había pasado un día tan diferente de la de Lucia, las matemáticas avanzadas que se enseñan en su clase, el señor Robinson, era bastante extraño y no podía manejar una clase tan bien, por lo que todo el mundo siempre hacían lo que querían sin escucharlo ni recibir ningún tipo de castigo. Mariana le contó a Lucia todo lo sucedido, hasta que llegaron a su mesa habitual.

En el almuerzo, la comida era desagradable, pero no es de extrañar que fuera una cafetería. Solo los jueves mejoraban las cosas porque era el día de la comida rápida y te vendían enormes sandwiches y patatas fritas.

Una vez que la bandeja se coloco sobre la mesa con lo que se suponía que era una especie de ensalada pobremente reducida, Lucia revisó su teléfono, como solía hacer cuando estaba aburrida.

De Solo Alex:
- ¿Estás enojada? Estoy aquí ahora si quieres hablar, puedo hacerte compañía de todos modos...

Lucia sonrió por la dulzura de ese mensaje. Negó con la cabeza lentamente y decidió responder rápidamente. En su mesa se añadieron Sol y otra pareja de chicos que ella solo había visto en la fiesta y que apenas recordaba el nombre. Hablaban el uno al otro, pero ella no escuchó.

De Lucia:
- No estoy enojada, tranquilo. Nunca me enojaria por una mierda así. Ahora estoy en el almuerzo, no puedo esperar para llegar a casa estoy destruida.

Y, guardando el teléfono en su bolsillo, comenzó a comer y a participar en los discursos de las chicas que estaban sentadas a su lado.

Una vez que terminó de comer, Lucia se puso de pie, arrojando lo que quedaba en la bandeja en el contenedor apropiado, seguido de Kaya, una de las chicas que estaban sentadas con ella y Mariana en la mesa.

"¿Te divertiste en la fiesta?" Preguntó Kaya, una vez que Lucia arrojó el papel de la bandeja primero.

Miró a la chica, asintiendo con una pequeña sonrisa en sus labios. "Fue bueno, hubiera preferido bailar más pero está bien", moviéndose a un lado para que la otra también pudiera acceder a la canasta.

"¡Mucho, fue una fiesta fantástica" respondió Kaya eufórica. Una vez que ambas terminaron, Lucia se apoyó en el pilar, viendo que la chica más joven todavía queria interactuar con ella.

"Creo que fui la única que no bebió tanto, pero fue divertido, había muchos tipos buenos, ni siquiera sabía que eran de esta escuela!" Lucia se rió de las palabras de Kaya, asintiendo lenta y levemente con su cabeza.

"No me fijé, pero me alegra que lo hayas disfrutado", dijo Lucia con una dulce sonrisa en los labios. "Ahora asegurémonos de que las chicas nos están esperando", con un ligero movimiento del hombro se separó del pilar, acomodando ligeramente su falda. "Y para que conste, no eras la única sobria que estaba allí, yo también estuve asi", le guiñó un ojo, riéndose,  juntas caminaron hacia el grupo.