Mi vida se vio gris cuando el amor que creía tener un día se esfumó, necesitaba algo para distraerme, algo con lo que sería perfecto distraer mi mente.
Vi un aviso en el auto de un chico
"𝘚𝘦 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢 𝘯𝘶𝘦𝘷𝘰 𝘢𝘺𝘶𝘥𝘢𝘯𝘵𝘦 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘊𝘢𝘱...
Hija de un Productor de cine y una actriz retirada, la defensa personal fue una materia más que debía llevar debido a que estaba propensa a secuestros por ser de la Elite de Swellview. A mis cortos 10 años ya sabía todos los tipos de deporte de defensa con los que podía sobrevivir a un ataque.
En ese punto de mi vida empecé a defender a los más débiles de mi escuela, los bullies eran los traseros que más amaba patear, me llamaban la fiera.
Y gracias a este tipo de deportes pude crecer sin mucho estrés y problemas, yo tenía una vida normal dentro de lo común para la gente de mi clase socioeconómica.
Mi familia son los Waldorf, una familia conocida en el medio a la vez privada con respecto a la vida de cada uno.
Somos la portada perfecta de una revista, mi madre siempre se encargó de ante el mundo hacernos ver bien, sobre todo para cuidar el trabajo de papá, nada de escándalos y una vida tranquila.
Todo iba bien, hasta que vi un anuncio que hizo que mi vida cambiara, uno el cuál solo aceptaba varones, ¿Qué por ser fuertes? Yo podía patearle el culo a cualquiera que se me presente, sin importar qué nunca se debe subestimar a un rival.
MALDITO MUNDO MACHISTA
Pero yo me aseguraría de demostrar que tendría más lealtad, compromiso y fuerza que cualquiera de los hombres, incluso de los que ya formaban parte del equipo.
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