Meliodas despertaba por los rayos de sol que penetraban su ventana, estiró su brazo para buscar a Elizabeth pero no la encontró supuso que fue al baño así que espero, pasaba el tiempo y nada de ella, su puso su bóxer y la busco al no verla sintió una presión en el pecho, miró al suelo y no estaba la ropa de la mujer decidió buscarla por la casa sin éxito, comenzo a hiperventilarse estaba imaginando lo peor cuando pone su mirada en el espejo y estaba un papel pegado, se acercó tenía escrito "pequeño Ángel" abrió la hoja y al leerla su corazón volvió a romperse en mil pedazos sus lágrimas se hicieron presentes.
Mi pequeño ángel, no se por donde comenzar.
Quiero darte las gracias por amar a esta desdichada, mentiría al decir que no calmabas mi tempestad y mis demonios, eres un ángel tragiste tantas cosas buenas a mi vida que no terminaría de mencionarlas.
Descubrí que el tiempo pasaba más rápido contigo y no importaba pues tu calida compañía me hacía sentir muy bien, tu amor tan empalagoso que al principio me hacia sentir rara después no podía vivir sin que de tu boca saliera miel tan dulce que sentía que iba a morir de diabetes o engordar, tus mentiras piadosas que describria al instante, tus pequeños detalles una rosa en mi cama siempre, tus comidas que a pesar de ser malas las amaba ya que me hacías saber que dedicaste un instante de tu vida para gisarme algo, despertar a tu lado era una bendición, me enseñaste a reemplazar palabras por miradas, conocí más de mil formas de besar y lo que es amar. De este tiempo dedicado sólo me arrepiento de que me hayas vuelto tu religión que mi palabra fuera la única con certeza y de haberte lastimado, tienes razón en una cosa soy lo que más has querido pero también lo que más daño te ha hecho, por eso tengo que dejarte ir no voy a negarte que me duele en lo más profundo de mi ser sin embargo es lo correcto, se que estas molesto y desconcertado ayer te pedí que me dejaras volver y te despiertas para no encontrarme solo quería estar contigo una noche más perdoname he vuelto a romper tu corazón, se que es de cobardes dejarte una nota pero no tenia valor de mirarte a la cara me marche sin hacer ruido para no decirte adiós.
Me voy Meliodas no me busques, ya no busques una razón para amarme toma el millón de razones que encontraste para dejarme aferrate, se feliz y busca un nuevo amor alguien que te merezca y te ame con la misma intensidad que tu, eres un gran hombre no dudo que alguien se enamoré de ti.Siempre tuya
Elizabeth GoddesPosdsta: si volvemos a coincidir prometo cuidar tu corazón y si no es en esta vida, te buscaré en otra.
No podía creer lo que leía ya no aguantaba se vistió rápido para salir de ahí, se sentía vacío que perdía un pedazo de su vida, no entendía del todo a la albina quería una explicación ahora clara frente a frente.
30 minutos antes
En el aeropuerto estaba Jericho que no paraba de llorar, Howser quien tenía una cara de pocos amigos y Elizabeth que lloraba, abrazo a su amigos por últimas vez pues ya estaban llamando su vuelo.
Howser: iremos a verte pronto no escaparas tan fácil (abrazo y beso la frente de la albina)
Eli: siempre abriré las puertas de mi casa para ustedes y vendré pronto por el momento les llamaré cuando llegue y como me va.
Jericho: no puedo creer que me estas abandonando, con quien me voy a embriagar? ¿Con quien me voy a reír hasta que me duela el estómago? Y más importante ¿con quien le haré la vida miserable a este tonto? (abrazo muy fuerte a la albina) te voy hechar de menos pero la distancia no nos separara.
Eli: Jeri no me digas esas cosas que me rompes (soltó a su amiga y los tomo de la mano) sigan juntos, envíenme fotos de sus fiestas, cuídense y sobre todo Howser no dejes que haga tonterías Jericho y Jericho aconseja bien a Howser.
Hicieron la última llamada al vuelo y ella los volvió abrazar
Eli: no le den a nadie mi ubicación y mi número, no me voy por siempre solo será un tiempo es por nuestro bien.
Los soltó y camino hacia su destino, entregó sus documentos y subió al avión, estaba en su lugar viendo por la ventanilla cuando sintió una presión en el pecho sabía que era Meliodas estaba leyendo la carta, sonrió con nostalgia al recordar su risa.
Eli: amor mío, cuidate y se feliz.
Tiempo actual
Meliodas estaba llegando a casa de la albina abrió y estaban los muebles cubiertos de blanco, subió a su recamara, no estaban sus pertenencias lloro como un niño pequeño y gritaba de dolor, había perdido una parte de su vida, maldecia despertar tarde tal vez si se hubiera levantado antes ella no se habría ido, miró en la cama un álbum de fotos limpio sus lagrimas y se acercó, volvió a llorar cuando vio que decía "pequeño Ángel" lo abrió y eran fotos de ellos con pequeños textos, salió de la casa de la albina y suspiro miró el cielo.
Mel: te llevaste todo lo que te pertenecía pero me dejaste y se supone que yo era tuyo (suspiro desganado) amor mío espero que este tiempo lejos recapacites y no sea demasiado tarde para amarnos como debe de ser, nada será igual ya no podré escuchar tu risa, tus historias, tus mentiras y tus te amo, te esperare aunque deseo que cuando decidas volver no me hayan encontrado.
El tiempo pasaba Meliodas sabía que era lo mejor para ellos, no iba a negar tenía ganas de buscarla pero nadie daba razón de la chica, así que decidió dejárselo a las Diosas ellas sabían si ella era para él o no.
Por su parte Elizabeth se encontraba en Danafol trabajando, a veces lo echaba de menos y quería verlo pero ella en su interior sabía que no merecía el amor tan puro de ese chico, decía que lo buscaría en otra vida y de no existir dicha posibilidad escaparía del infierno para buscarlo en el cielo y amarlo plenamente.
Llegamos al final de esta historia espero les haya agradado este final. Gracias por el tiempo dedicado. 💖
ESTÁS LEYENDO
Antología
FanfictionElizabeth una chica que vive sola, por la universidad, lleva una rutina pero todo cambiará cuando lo conozca...