Taehyung estacionó su automóvil frente al departamento de Jimin. Estaba algo molesto, llegaban las vacaciones de verano y eso significaba que Jimin volvería al norte. Cada verano era igual, desde que eran novios hace tres años, su novio volvía a su casa para jugar a ser hetero frente a su padre.
Odiaba que Jimin volviera a la casa de su padre. Taehyung no olvidaba lo que Gabriel le había contado y aún sentía ganas de darle un puñetazo al padre de Jimin por golpearlo, además una parte suya temía que su novio aún fuera golpeado cuando visitaba a su padre.
Cada vez que Jimin volvía del norte, Taehyung hacía un chequeo completo del cuerpo de su novio, obviamente aprovechaba de besar cada rincón de su cuerpo y de hacerle el amor por horas, pero no dejaba de buscar cualquier indicio de golpes.
Nadie iba a golpear a su novio de nuevo. Nadie.
Cuando entró en el departamento de Jimin con la llave que su novio le había dado, Gabriel estaba en la sala en lo que parecía una discusión con Jimin.
En cuanto lo vieron, ambos dejaron de hablar notoriamente incómodos. Era raro verlos discutir, Gabriel y Jimin eran como hermanos. Aún cuando ambos tenían la misma edad, Gabriel era muy protector con Jimin.
—¿Está todo bien? —Preguntó en cuanto cerró la puerta.
—Sí. —Dijo Jimin tímidamente.
—No. —Dijo Gabriel caminando hacia la puerta—. Los dejo para que hablen. Tal vez puedas meter algo de sentido común en la cabeza de tu novio.
Antes de que Gabriel saliera del departamento Taehyung detuvo a Gabriel por el brazo.
—Tus llaves. —Le recordó.
Taehyung se contuvo de sonreír, Gabriel siempre olvidaba sus llaves.
—Gracias. —Dijo Gabriel cogiendo las llaves y saliendo rápidamente.
Cuando quedaron solos Jimin caminó al dormitorio y Taehyung lo siguió. Cuando vio el bolso a medio hacer de Jimin, su mal humor volvió.
—¿Por qué preparas tu bolso tan pronto? ¿Pensé que aún te quedarías una semana más?
—Mi papá llamó... Me pidió que viajara mañana.
—¿Mañana? ¿Por qué no me lo dijiste antes?
—Llamó hace solo una hora.
—¿Por eso discutías con Gabriel?
—En parte. Lo que pasa es que mi papá me pidió que... —Dijo Jimin tan bajito que no alcanzó a escuchar la última frase.
—¿Tu papá te pidió qué?
—Qué acompañara a la hija de un amigo a una comida.
—¿Cómo acompañante?
Jimin asintió con la cabeza y desvió la mirada avergonzado. No era la primera vez que tenían una discusión parecida. Era habitual que Jimin aceptara asistir a las citas que su papá le concertaba para evitar contarle que era gay.
Taehyung lo aceptaba porque sabía que Jimin no quería salir del closet con su padre aún, además solo acompañaba a las chicas y luego no las volvía a ver. Pero que lo aceptara no significaba que no le molestara mucho.
—¡Genial! —Dijo irónicamente—. Entonces ahora tendré que dejarte partir una semana antes para que tú puedas fingir ser hetero delante de tu padre.
—No... —Dijo dejándose caer en la cama—. Por favor no te enojes conmigo.
Taehyung respiró profundo para calmarse. En el tiempo que llevaban juntos había aprendido a controlarse para no alterar a Jimin.
