Electrick Shock ( Niall y Tu ) 1era Temporada TERMINADA

Capitulo 47

-¿Cuánto más hay que esperar?
-Solo un poco amor, terminan ellos y es nuestro turno.
-Pero yo me quiero subir a los autos chocones ahora- Demandó tiernamente Niall.
-¿Puedes callarlo un rato _______? Me tiene harto.
-Esponjosito, ¿Te callarías un momento?
-¿Esponjosito?- Los chicos comenzaron a reírse como locos.
-¿Qué? Es mi nombre.
-¿Acaso tú le dices blandita?
-No, le digo Felpudita- Volvieron a reírse.
-No se rían- Me crucé de brazos.
-Es que ustedes dos son tan hilarantes… Y yo sé de eso- Presumió Louis.
-¡Es nuestro turno!

Niall comenzó a dar pequeños brincos al ver cómo la gente desocupaba los autos, estábamos casi de los primeros en la fila así que corrimos –más bien Niall me jaló- hasta allá, me subí a un auto y Niall otro pero después cuando lo busqué con la mirada no lo hallé.

-¿Disculpe señorita ha visto a mi novia?
-¿Qué haces Niall?
-Nada, solo te extrañé- Intentó sentarse.
-¡Son solo para una persona!- Gritó uno de los empleados.

Sin siquiera reclamar ni nada por el estilo –como él normalmente lo hubiese hecho- fue a otro auto y lo comenzó a empujar hasta dejarlo junto al mío. Reí al ver lo agotado que había quedado por eso, se subió en el y esperó que la alarma sonara. Cuando sonó Niall saltó de su auto al mío, subiéndose sobre mis piernas ya que eran pequeños y solo cabía una persona, o dos pequeñas.

-¡Sale de ahí!
-¡Aprieta el acelerador!

Hice caso a su orden y lo presioné fuerte, salimos lejos y chocamos con una de las paredes. El hombre de seguridad entró y nos comenzó a perseguir, yo apretaba el acelerador mientras Niall tomaba el manubrio, yo simplemente era demasiado torpe como para no chocar con todo.

-Demonios, nos va a alcanzar… ¡Córranse mocosos!- Le gritó a los niños.
-Cálmate- Reí- No nos atrapa… ¡Córranse mocosos!- Dije al ver lo cerca que estaba el hombre.
-¡Chicos, persíganlo!

Los chicos comenzaron a seguir al hombre, el cual terminó arrancando para no ser chocando por ellos, pero lamentable salió para decirle a un señor que pararan el juego.

-¡Esto es injusto, yo pagué por cinco minutos, y estos fueron cuatro con cincuenta segundos!- Reclamó Niall.
-Esponjosito- Lo abracé fuerte y comencé a mover las piernas.
-Amor… me estás violando.
-Tonto- Le pegué en la pierna- ¡Ya bájate!
-De acuerdo- Soltó una carcajada.

Salí sobre la espalda de Niall, el hombre nos exterminó con la mirada y nos susurró un “ustedes dos y ellos tienen prohibido volver a entrar” Mi novio quiso decir algo pero le cubrí la boca antes que nos prohibieran subirnos a todas las atracciones.

-¿Cómo se te ocurre hacer eso?- Lo reprochó su madre.
-Fue divertido.
-Pobre hombre, Harry casi lo arrolló.
-Usted lo dijo… casi- Sonrió el rizado.
-Un elefante rosa…- Dije embobada.
-¿Lo quieres?- Yo solo asentí lentamente con la cabeza.

Aun estando sobre su espalda me llevó hasta donde se encontraba el puesto de botar las latas, pero más importante… El elefante rosa.

-Me da una pelota.
-Ten- Se la extendió tras este pasarle el dinero.
-Vamos- Me bajé de su espalda y le besé la mejilla- Mi felicidad futura depende de ti.
-No me presiones.
-De acuerdo- Alcé los brazos- Pero sería la persona más feliz del mundo si lo consigues.
-No ayudas.
-Vamos Niall- Lo apoyó Liam.
-Uno, dos y tres…
-¡Auch!- Exclamó Louis.
-Lo siento, no quería pegarte en el ojo.
-Con esa puntería necesitaras como mínimo 30 pelotas- Rió el chico del puesto.
-Dame 36 pelotas- Le extendió todo el dinero que tenía en el bolsillo.
-¿¡36 pelotas!?- Dijimos todos asombrados.
-Sí.

El chico negó con la cabeza y puso sobre la mesa un bote con muchas pelotas pequeñas. Niall tomó la primera y nada, tomó la segunda la y le pegó a Harry en el ojo tras echar la mano hacia atrás.

-Primero yo y ahora mi novio, eres un peligro público Horan.
-Esperen- Tiró la pelota que aún tenía en la mano.
-Muévete- Lo corrí chocando mi cadera con la suya- Así se hace esto.

Eché cuidadosamente la mano hacia tras, apunté y bingo… tiré todas las latas al piso.

-¡Sí!
-Aquí tienes.
-Fanti- Abracé el peluche.
-¿Ahora qué hago con las 33 pelotas que quedan?
-¡No hay reembolso!- El chico cerró rápidamente el puesto.
-Para que compraste tantas hijo.
-No te daré más dinero- Dijo su padre.
-¡La rueda de la fortuna, vamos!

Seguimos a Harry y nos subimos todos; yo con Niall, Maura con James, Liam con mi abuela y Harry, Louis y Zayn.

-Si es tan lindo- Lo apreté.
-Lo sé.
-Me refería a Fanti.
-¿Y yo no?
-No, tú eres adorable.
-¿Hace frío, no?- Paso lentamente su brazo por mi espalda.
-No tienes por qué hacer eso, puedes abrazarme siempre que quieras.
-Fanti será nuestro hijo.
-No, yo lo gané así que es mío.
-Pero yo aporté con las pelotas.
-Sí pero aun así es solo mío.
-No por eso es tuyo, es igual que un bebé real tú lo tuviste pero yo aporté con la pieza fundamental.
-No compares eso con mi Fanti.
-Es lo mismo, en este caso las pelotas serían…
-Entendí, no tienes que explicarme eso- Besé a Fanti- Es muy joven para escuchar esas cosas.
-¿Por qué amas tanto a ese elefante?
-Cuando tenía siete años mi papá me llevó a la feria y ganó para mí un elefante rosa igual a este pero cuando íbamos camino a casa iba jugando con el mientras tenía la ventana abierta así que sin querer lo solté y jamás lo volví a ver.
-Cuando pequeña tienes que haber sido adorable- Besó mi frente y me atrajo a él.
-No, tú tienes que haber sido adorable- Cargué mi cabeza en su hombro.
-Sí, desde pequeño fui adorable.
-¡Niall!
-¿¡Qué!?- Le gritó a Harry que lo llama desde arriba.
-¡Hola!
-¡Cállate!- Me miró- Interrumpieron nuestro momento.
-Sí, pero… ¡Fanti!

Sin querer se me soltó de las manos y calló hasta la parte de debajo de la ruleta justamente cuando nosotros estábamos en la parte más alta de esta. 

-No importa, cuando llegues abajo lo recogeré- Me besó dulcemente.
-De acuerdo.

Ya estábamos casi abajo así que Niall levantó el fierro de afirme para poder bajarse, segundos antes de llegar al piso saltó con cuidado y recogió a Fanti.

-¡Niall!- Lo único que pude hacer fue taparme los ojos al ver como estaba a punto de ser golpeado por una de las cápsulas de la rueda