ᴇʟ ɢɪʀᴏ ᴅᴇ ᴍɪ ᴠɪᴅᴀ ❁~

Nex_5

Secuestrada

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El ojo azul le hizo una seña a dos hombres que estaban armados, los cuales no había notado sus presencias. Los dos hombres armados caminaron con mucha prisa hacía mi y me esposaron las manos. Genial, ahora yo soy la criminal de aquí y ellos la policía. 

—Basta de mierdas, cuando piensas pagar me.- Habló el ojo azul con tanto enojo que pegué un brincó de susto. Diosito.

Se inclinó a la altura del anciano y lo miró con mala cara.

—Dame  solo una semana,
Por favor.- Rogó el anciano mientras sus manos temblaban. Es incluso gracioso y divertido pero me daba pena por él.

Aún no sabes que harán contigo.

Odiaba cuando esa pequeña voz en mi cabeza arruinaba mis momentos de diversiones. 

A lo mejor solo estaban haciendo una broma. Ya se, puede que sea un teatro.

Él hombre se puso pensativo y entrecejo un poco sus ojos azules, Sonrió y luego se incorporó.

—Esta bien. Vete.- Ordenó sin complejos.

El anciano se levantó no sin antes besar los pies de él ojo azul. A lo mejor su intención era besar su pierna pero terminó besando los tenis que este tenía en los pies. Hermosos y caros tenis pero aún así, besarlos es asqueroso.

—Gracias, gracias, gracias señor.- Terminó mareandome escucharlo agradecer tantas veces al ojo azul. Pero frenos sus agradecimientos y caminó rumbo a la salida del callejón ya yéndose, pero no lo logró. El ojo azul apretó el gatillo y disparó directamente a la cabeza del hombre, este calló sin vida y parte de la sangre que salió salpicado de su cabeza me calló encima. 

Acaba de matarlo. Acababa de matarlo. LO MATÓ. LO MATÓ. LO MATÓ. ESTA MUERTO.

Cerré fuertemente los ojos para no ver la herida, ni la sangre, ni la cara de ese asesino que estaba apunto de volverme difunta.

Voy a morir. Voy a morir. Voy a morir. Voy a morir.

—Retiren el cuerpo.- apesar de estar con los ojos cerrados, sabía que esa orden había sido dada por él asesinó.

Ahora es asesino, no más ojo azul.

Resulta gracioso como la maldita voz dentro de mi cabeza no sabía respetar momentos tensos como estos.

Presté algo de valor y Abrí los ojos. Se acercaba a mi con una sonrisa de oreja a oreja como si esto fuera lo mas épico y gracioso del mundo. Los dos otros hombres, arrastraron el cuerpo muerto del anciano y lo metieron en el basurero.