Capítulo 12

900 73 3
                                    

- Los volveré a ver pronto - Calle se despedía después de la increíble tarde familiar -

- Está bien, cariño - Mafe beso a la menor de sus hijas - Un placer conocerte, Poché, espero verlas muy pronto

- Así será, señora Calle - Poché le daba una cálida sonrisa -

- Cuida a mi bebé, Poché - Germán le recordaba -

- Por supuesto señor Calle

- Los amo mucho, nos vemos luego, tengan cuidado - Calle se despidió de sus padres y salió de la casa junto a Poché- ¿Qué te parecieron mis padres?

- Son muy amables, cariño - Poché besaba el dorso de su mano - ¿Crees que cause una buena impresión?

Calle rio ante el comentario de su acompañante y asintió con su cabeza mientras le daba una sonrisa de tranquilidad

Mientras tanto, uno de los hombres de Matu las vigiliaba desde muy cerca

llamada con Matu

- Jefa, acaban de salir de la casa de los Calle, ¿Lo hacemos?

- no, no, esperen, aún no, debemos esperar que bajen la guardia, hay cambio de planes, primero nos llevaremos a Daniela, ¿Entendido?

- entendido, pero debemos tener mucho cuidado, hay mucha seguridad, demasiada diría yo - el hombre estaba al pendiente de la gran cantidad de hombres que habían-

- Lo sé, debemos planear todo bien, mantenlas vigiladas - Matu cortó la llamada-

Aquel hombre observo como las mujeres se subían al automóvil custodiado por 4 guardias de seguridad, y emprendieron el camino.

Calle y Poché iban tomadas de la mano, como un par de tortolas, Poché besaba cada uno de los nudillos de las delicadas manos de la castaña, mientras calle, besaba las mejillas de la chica con mechón dorado

- ¿Qué quieres hacer, cariño? - Poché le daba una mirada a Calle-

- ¿Dónde estarán tus padres? ¿Se quedarán con nosotras?

- No bebé, estarán en casa de mi abuelos hasta el martes

- Entonces deberíamos ir al hotel, y pasar un tiempo de calidad tú y yo - la castaña sonrió con picardía mientras hablaba al oído de Poché -

Poché trago con dificultad y dió un leve apretón en el muslo de calle, mientras su piel se erizaba

- Claro, lo que tú desees - La menor intentaba hablar con seguridad -

El camino fué lleno de provocaciones mutuas y disimuladas, al llegar al hotel, subieron hasta su habitación, Poché decidió llamar a sus papás para avisarles que estaban en la habitación y "dormirían".

Poché se metió al baño y se dió una rápida ducha, se dirigió hacia la habitación y se puso ropa cómoda, Calle se acercó por la espalda y dió un beso en el hombro derecho de Poché, empezó a caminar con sus besos, dejando pequeñas mordidas hasta que llegó su nuca, hizo a un lado el cabello y beso varias veces su cuello, llegó a su oído

- Me daré una ducha, espérame aquí - Le dió una leve mordida y se levantó de la cama -

Poché quedó con una respiración irregular, sin saber cómo controlar sus impulsos, cómo pudo, se levantó de la cama y se dirigió a buscar agua, pues necesitaba refrescarse

Calle, se daba una larga y caliente ducha, para ella tampoco era sencillo haber tenido que separarse del momento que acababa de tener con Poché, estaba lavando su castaño cabello cuando su mente le jugó una mala pasada y empezó a imaginar cómo los fuertes brazos de Poché tocaban su cuerpo por completo, en como aquellos gruesos labios le besaban mientras le quitaban poco a poco el alma, el roce de sus cuerpos, que tan fuerte tendría que apretar las sábanas para resistir los gemidos que podrían salir hasta desgarrar su garganta.

Calle no estaba segura de lo que pasaría esa noche, pero sabía que se moría de ganas por estar con Poché, después de aquellas sesiones de besos que empezaban de la manera más tierna e inocente y terminaban siendo apasionadas y calurosas, le habían dejado claro que Poché sabía cómo complacer a una mujer, estaba segura que después de que Poché causará estragos en su ropa interior luego de hacer un leve roce con su muslo, no podría contenerse está vez.

Por otro lado Poché, se encontraba pensando en la razón por la cuál calle se tardaba tanto en la ducha aunque era de esperarse, a dicha castaña le encantaba darse un buen rato en las duchas,  y por Poché no había problema, el único inconveniente es que ese día, Poché tenía la mente bastante fluida, luego del fuego que la castaña había encendido en ella, después de aquel juego que estaba haciendo desde su maravilloso plan de pasar tiempo de calidad a solas.

Poché para intentar despejar su mente encendió la televisión y empezó a ver lo primero que encontró, su celular empezó a sonar y ella no tardó en contestar al darse cuenta que se trataba de Laura

- Oí oí - Poché saludaba con una sonrisa -

- Hola - Las Villa sonreían de la misma manera - ¿Cómo van? ¿En dónde están? Oh por dios Poché, estás teniendo sexo con calle

- Estamos muy bien, ¿De dónde sacas eso Lu? - Poché reía intentado no pensar en que deseaba hacerlo -

- Estás medio desnuda

- No, no estoy medio desnuda, siempre estoy así, ¡Exageradas!

- No lo sé, esperamos no estar interrumpiendo, queríamos avisarte que viajaremos a Los Ángeles la próxima semana, si ustedes quieren, pueden venir con nosotras

- Lo hablaré con Calle, les avisaré mañana, o luego, quiero pasar unos días con mi familia

- Está bien, nosotras viajaremos el siguiente sábado, recuerda avisarnos, no tengan mucho sexo - Las Villa colgaron la llamada-

Poché sólo rio y continúo viendo aquel capítulo de los Simpsons, escucho como el agua de la ducha paraba de caer.

Calle empezaba a aplicar en su blanca piel la crema humectante con olor a limón, sus piernas, sus brazos, su abdomen. Luego, desenredo su castaño cabello, aplicó un poco de perfume sobre su cuello, puso su ropa interior color negro de encaje, aplicó humectante sabor limón sobre sus labios y salió por el baño muy despacio.

Con sus pies descalzos empezó a caminar por el cuarto del hotel hasta llegar a la habitación en dónde se encontraba Poché, abrió la puerta lentamente y vio que Poché se encontraba acostada boca abajo, tenía una respiración tranquila por lo que supuso que estaba empezando a dormir.

Se acercó lentamente a la cama, se recostó al lado derecho de Poché, puso la manos obre la espalda de la más joven e inicio a dar suaves roces con la llena de sus dedos, beso suavemente el antebrazo de Poché, y empezó a subir por tersa piel hasta llegar a su clavícula.

Para este momento Poché estaba completamente despierta, pero no tenía el valor de voltearse, minutos más tarde sintió como Calle se subía sobre su espalda

- ¿Por qué no me miras? - La castaña hablaba con una voz rasposa

- Quiero mirarte - Poché se volteo para contemplar la belleza que tenía en frente - Wow

Poché sintió como el aire se salía de su cuerpo

ROCKSTARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora