Prólogo

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—La tierra es sagrada, en ella se encuentra todo lo vivo, conectado e interrelacionado; todo tiene conciencia y esencia propia. Gaia es el ser que acogió a la humanidad en su seno, para su desarrollo y evolución, pero todo tiene su límite, si las personas no dejan de ser arrogantes y creer que son Dioses la tierra quitará de esas horribles manos todo lo que les ha brindado —comentaba una mujer de cabellos negros como la noche que tenía recostado en sus piernas a su hijo tratando de propinarle calor mientras viajaban en esa carreta llena de paja.

—¿La tierra nos odia mamá? —preguntó el pequeño con una brillante curiosidad.

—No mi amor, es solo que hay personas que no saben lo que tienen hasta que es demasiado tarde —besó esa tierna mejilla del pequeño.

—Mamá no quiero que la tierra desaparezca —escondió su carita en el pecho de la mujer.

—Y no será así, el Elegido ha salvado la tierra muchas veces.

—¿El Elegido? —frunció el ceño confundido.

—Sí, escucha YiXing, cada cierto tiempo el oráculo de los sabios nombra a un Elegido que debe ir a la torre "Ai", en ella está la mano de Gaia quien nos protege de toda devastación. Dentro de la torre existen once cuartos con una bendición en cada uno de ellos que iluminarán al Elegido. Una vez reunidas todas las bendiciones en su poder, el Elegido podrá crear la doceava bendición y salvará a la tierra. Nada pasará tesoro, así que no temas.

YiXing confiaba en su madre así que con esas palabras él ya se encontraba mucho más tranquilo. Se acurrucó más en los brazos de su madre así que pudo cerrar sus ojitos y descansar con total serenidad hasta llegar al pueblo que sería su nuevo hogar. 

El Elegido [EXO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora