Palabras del Alma

7. Corazón

Séptima parte: Corazón.

***

¿Quién fue el que dijo que el amor no duele?

Porque estoy segura de que jamás amó a alguien que no era el indicado. Que jamás tuvo que ocultarlo de la mirada curiosa de las personas. Que jamás se tapó el rostro para sonreír a escondidas o apartó la mirada para que no vean el brillo de sus ojos.

Entonces te miro y me da por sonreír y se me olvida que es amor no correspondido. Me abres la puerta, me llamas y me texteas pero no es recíproco, porque esto que te doy no me lo devuelves de igual forma.

Te acuestas en mi pecho y hablamos durante horas. Sé que algún día tendré que despedirme, irme lejos e intentar olvidarte, pero por ahora se siente tan bien estar contigo que me miento y me repito una y otra vez que las cosas van a cambiar y finalmente me amarás.

Cortas la conversación, miras hacia arriba y ahora luces extrañado. Mencionas que no escuchas latir mi corazón.

¿Que qué le pasó a mi corazón? Lo arranqué de mi pecho y lo tiré lejos para no escucharlo latir cuando te viera. Porque hace tiempo me miento y digo que será la última vez, pero estoy otra vez en tu casa y tú en la mía, los dos solos, juntos, pero a la vez separados.

Entonces llega el día. Tomaré ese vuelo e iré a buscar mi corazón, porque quiero que vuelva a latir dentro de mi, que caliente mi cuerpo y así pueda ofrecerle ese calor a otra persona. Pero mi mente es egoísta, te quiere solo para mi, porque sabe que aunque tampoco he escuchado latir tu corazón, te gusta nuestra cercanía y la disfrutas...pero no la amas.

Entonces vuelvo a intentarlo. Tiro tus fotos, borro tus videos y quemo tus regalos. Duele como desprenderse una parte del cuerpo, pero el frío que siento por dentro empieza a congelarme y mi corazón llora porque vuelva por él.

Y lo hago. Corro y dejo todo atrás para que nada me recuerde a ti. Corro y me escondo con mi frágil corazón entre mis manos, esperando a que pase aquella turbulencia. Huyo por todo el mundo, hablo todos su idiomas y sigo todas sus costumbres, pero aunque lo haga y vea cientos de rostros de personas todos los días, ese café de tus ojos me despierta todas las mañanas y no me permite avanzar.

Me llamas, incluso desde tan lejos y me preguntas por mi regresar.

Pero ya he hecho mi elección, y entre tú, este amor no correspondido y mi corazón, escogí al único que me brindaba calor.

***

Fecha de creación: Agosto de 2024