Llego al instituto, bien otro día mas en este infierno.
Allí esta Clara la niña que os he contado que es una drogadicta.
Bien, nueva fiesta.
-Hola Katy
-Hola Clara, ¿que tal?
Sabéis que en esta vida hay que ser falso, sea quien sea.
-Pues muy bien, toma- dijo cediéndome un folleto de su fiesta
-¿Nueva fiesta?
Esta niña hace demasiada fiesta.
-Claro, espero que ha esta vengas.
-Ni lo dudes
Iba por el pasillo a mi taquilla, cuando apareció Marta, mi mejor amiga de toda la vida, pero venia a lo de siempre ha decirme que fuera a la fiesta.
-Katy ven a la fiesta tía
-No, paso de meterme de todo y acabar muerta
-¿Tu estas tonta? El caso... Que vienen unas personitas que a ti te gustara ver
-¿A quien?
-Tia, los Oviedo
-¿Los del Cervantes?
-Si
-¿Los mismos Oviedo del instituto Cervantes?
-Claro tía
-¿Y tu eres mi mejor amiga?
-¿Katy? ¿Deliras?
-No, flipo, que es diferente, eres mi mejor amiga y no sabes que me caen MAL los Oviedo
-¿Por?
-Son unos chulitos que tienen a todas a sus pies
-Bueno vale, con los Oviedo no te he convencido pero... Viene Oscar tía
-¿Mi Oscar?
-Si
-Entonces claro que voy
-Luego quedamos para ir a por el vestido
-Vale
La di un beso en la mejilla y me fui corriendo a clase.
Por fin sonó la sirena para irnos a casa.
Espere a Marta a la salida, ella es muy tardona.
Por fin la veo salir.
-Al autobús de las 3 ya no llegamos, Gracias
-Denada- dijo vacilando
Llegamos a la parada del autobús, parecíamos tontas, se acababa de ir uno.
-¿Entonces vienes a la fiesta?
-Que si.... Pesada
-Bueno vale Katy tía, mas borde no puedes ser
-Lo se- dije soltándole una sonrisilla irónica- ¿Por cierto que día era?
-Este domingo
-No puedo
-¿Por?
-Examen el Lunes
-Joder tía, estudia hoy, mañana, pasado...
-Hay que si plasta que voy. ¿Quien nos lleva y nos trae?
-Mi madre
-Vale, mira hay llega el autobús.
Saque el bonobús de la mochila y subí al autobús, coji asiento y Marta se sentó a mi lado.
-¿Y tu que?- dije
-¿Yo que de que?
-¿Por quien vas a la fiesta?
-Aaa yo... A quien pille
-Claro...
Hubo un silencio muy incomodo hasta llegar a la parada en la que nos bajábamos, el autobús metió un frenazo. Levante la vista del móvil y era nuestra parada.
Le di un codazo a Marta para que se levantara, cogimos las mochilas y nos bajamos del autobús.
