𝘄𝗲𝗹𝗰𝗼𝗺𝗲 𝗵𝗼𝗺𝗲.

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Sin dejar caer la verdad, MinHo tomó sus cosas y se marchó por la puerta, si es que ese era una buena forma de decirlo.

Volvió a casa. Volvió a su vida normal de antes, con sus padres y amigos. Y, por mucho que lo intentase no logró asimilar el hecho: de que había vuelto y aún así todo se sentía ajeno.

Pero era ilógico, era su casa, su habitación junto a sus mascotas... no era nada nuevo y no tenía que adaptarse al ambiente... porque era el mismo de siempre. Nada había cambiado; excepto él.

Porque ahora tenía una visión diferente a lo que quería hacer con su vida; pero, de repente, se hallaba solo, en un vacío casi opaco, un abismo que le dejaba un sabor amargo en la lengua y el pesimismo por no volver a tener esa ilusión.

𝑝𝑟𝑒𝑡𝑡𝑦𝐛𝐚𝐛𝐲.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora