Ahora es de madrugada, no tengo sueño y eso es lo que anhelo, no tengo idea de cuándo volveré a soñar con el...
cierro mis ojos, e intento dormir pero no puedo. Si querer es poder, ¿por que no puedo dormir si quiero?
Aveces creo que estoy quedando loca, o simplemente estoy loca.
Me quede dormida, pero.. No pasó nada, espere y espere para dormir y resulta que no sueño contigo, eres un estupido, inútil, te aprovechas de mi al saber que te te extraño cada segundo que no estoy soñando, mis lagrimas salen sin control, mis manos tiemblan y mis mocos bajan como una cascada de agua caliente, y lo peor del caso es que es por alguien que ni conozco, aquí no hay una sola persona estúpida y esa soy yo.
- ¿Tiene pastillas para poder dormir?
*Le dije en un tono agresivo a la farmacéutica. *
- si, pero no se venden sin receta ¿tiene usted?
- Si, esta por acá.. Oh mierda la he perdido, y mi medico esta en otro pueblo y no me consulto otros médicos que no sea mi medico de cabecera.
- No se puede, ya que mi supervisora revisa las ventas de esas pastillas y tengo que justificarlas.
Aquí estoy en casa y luego de 3 horas en la calle, buscando pastillas para poder dormir, son las 2 de la tarde se que no es hora de dormir pero si hubiera tenido esas malditas pastillas estuviera estado soñando con mi príncipe, pero para buena o mala suerte mía no las tengo.
3 de la mañana, sola en casa como siempre, no tengo una mascota para jugar, un hijo para bañar, menos un esposo para besar, tengo la misma ropa por muchas horas, sentida en el mismo sillón las mismas horas, y ansiosa por dormir por horas, saldré a caminar,
Se que no es recomendable pero lo haré..
- Tranquila.
*Con una cara de maniático me dijo*
Grité pero nadie me escuchó, suplique pero nadie tuvo misericordia de mi, simplemente se enfocaba en entrarlo y taparme la boca, me golpeaba para ver si ya dejaba de gritar, fue el primero, me dejo un gran y enorme recuerdo en mi vida.
- Aunque grites, no me hiré, aunque me golpees, no me hiré.
*eso fue lo ultimo que me dijo*
Esperaba que fuera de una manera más romántica, con una persona más sensible, y con una persona que ocupe otro lugar en mi corazón, a diferencia de ese cerdo que solo siento odio por el.
Cabello descuidado, ropa sucia, barba negligente y piel morena, así describo al hombre que abuso de mi sexualmente.
