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Diosme habló y susurro "Ama a quien tú elijas" Y yo la elegí a ella para amar... Lo demás ya es arte. LHMR

En los últimos días de lo que corresponde al encierro por la pandemia en México y el mundo se han presentado muchas situaciones en donde me he percatado de diversas actitudes y aptitudes que he desarrollado con el paso del tiempo entre todas ellas también nuevos hábitos y ha cambiado mi percepción del entorno un tanto más a la concertación de mis palabras y siendo fiel a mis intereses le he sido fiel a un amor que me ha salvado la vida y es por eso que decidí escribir para mostrar mi gratitud a esa acción tan ajena a mi vida por parte de una desconocida (hasta cierto punto) y realmente intento explicar con las palabras que se enredan en mi cabeza lo sucedido.

Ludovico Ariosto es el creador de Ludovico Enfurecido en donde el nombre del actor es el mismo que el del personaje y es un relato en forma de poemas con un toque sutil de lo que la prosa ha establecido en los relatos épicos de caballeros y narra cómo se convirtió en un loco furioso con canticos recordando un poco la época épica de los juglares. El escrito que se describe a continuación es innegablemente fabricado por la audacia que tiene el poeta para plasmar la prosa y se entreteje el ingenio con un argot característico de su época y me recordó el poema de Ludovico Enfurecido, es por ello que decidí llamar a la obra como Ludovico enflorecido porque se intenta plasmar la locura que me hace sentir una mujer hermosa presiento que he perdido la cordura e intento plasmar mi experiencia de un amor que calcina mis huesos desde que despierto hasta que me vence la furia del mismo y fallezco día con día en la imaginación de un posible encuentro.

Eran como las doce de la noche cuando por las redes sociales notaba a una mujer que quizá no había visto en todos los años que tengo de estar en ellas para ser conscientes un poco más de 14 años de mi entrada al internet, la publicación que fue la que ganó mi atención fue una que decía ¿Si tuviera que viajar para invitarte un café a dónde iría para verte? – Nada parecido había visto en lo que llevaba de tiempo en las redes así que me llamó mucho la atención y contesté enseguida. -CDMX (Ciudad de México)- dejé de lado la publicación y me puse a pensar en cosas terribles que anidaban en mi cabeza. 

Ludovico enflorecidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora