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Se supone que Jeon Jungkook estaría haciendo sus tareas, pero definitivamente la acumulación de tareas del más alto se fueron al olvido porque el dueño de estas estaba muy ocupado besando al lindo chico que tenía entre sus brazos.

Y si, ambos chicos entrando al cuarto se habían vuelto a besar y no se habían detenido hasta que su oxígeno se acababa para volver a empezar, Jungkook mantenía acorralado contra la puerta a Yoongi y este de igual forma le devolvía el beso y sus pálidas manos se mantenían aferradas a la chaqueta de Jeon.

Una risita se escucha por la habitación en el momento que Jungkook muerde con suavidad el labio inferior de Yoongi y sonrientes se separan mirándose con ojitos brillantes y sonrojos adorables.

Era real. Min Yoongi estaba ahí frente a él y Jungkook no pierde la oportunidad de acariciar la sonrojada mejilla de Min provocando en este un estremecimiento que le roba una sonrisa. Era adorable, totalmente adorable y hermoso.

—Lamento el impacto en la puerta... —susurra Jeon agitado y Yoongi sonríe avergonzado.

—Tampoco es que me haya quejado... solo fue inesperado.

—Ahora que estás conmigo no puedo evitar no besarte y hacerte muchas cosas más...

—Desvergonzado —susurra Yoongi y Jeon ríe.

—Eres hermoso —musita Jungkook dejando un besito fugaz en los labios del chico.

—Harás que me sonroje.

—Ya lo estás —sonríe Jungkook satisfecho—, y yo aún no te hago la pregunta... Min Yoongi, ¿quieres ser mi bonito novio?

—Tengo que pensarlo...

—¿QUÉ?

—Claro que sí, Jungkook...

Jungkook suspira aliviado volviendo a besar a su lindo y precioso novio.

La tarea se podía hacer más tarde. Ahora solo le quedaba disfrutar de la presencia de su novio. 


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Mientras estaban recostados, Jungkook se encargaba de hablar sin parar y Yoongi lo escuchaba sonriente. Los nervios se habían desvanecido, aunque los sonrojos se mantenían presentes.

—No era justo, se supone que tú eras lento. Me mentiste... —sonríe Jungkook recordando sus tiempos de escuela. Sin mencionar sus fracasos, eso fue una desgracia. Olvidar. Olvidar.

—Creí que lo sabías, siempre jugué basquetbol...

—Yo no sabía hasta que Jimin dijo que lo hacías, me sentí estafado y lo mismo pasó cuando conocí al mini Yoongi, tampoco sabía que tenías hermanos hasta que fuimos al paseo a Busan...

Cerrar el ciclo ➠KOOKGIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora