Chapter I: Mikasa Ackerman

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Heme aquí, caminando bajo la lluvia, sintiéndome el más idiota, lleno de remordimiento. El peor ser humano del mundo, y vaya que la basura humana abunda.

¿Que cómo llegué a esta conclusión?

Sencillo, no hay otra jodida palabra que me defina, soy un reverendo maldito. volvamos un poco atrás, y verán cómo me dan la razón.

SIETE MESES ATRÁS.

-Hey Levi, ¿supiste del resultado de las elecciones?

-No Mike, aún no me doy una vuelta por la rectoría. – no pensaba preguntarle, aunque sabía que se moría por soltar la sopa-.

-pues yo sí sé... Y bien, no piensas pregunt...

-Ya lo sabré tarde o temprano ¿no? Qué más da. Vamos por algo de tomar, me muero de calor.

-De verdad que eres raro Ackerman... vamos.

Caminamos en silencio al kiosco de la universidad para comprar algún refresco o alguna cosa que aplaque el maldito calor, Mike me seguía dando miradas de reojo, pero no pienso caer... realmente no me interesa, he sido el presidente desde que estoy aquí, tres años seguidos, no es como que me preocupe que algún otro incompetente tenga el poder de usurpar mi puesto.

-Dos refrescos por favor.

-Enseguida Levi – me contesta la joven detrás del mostrador con sonrisa coqueta.

Tsk, a esta qué le pasa, pienso para mí. Hasta que siento que me codean

-Vaya Ackerman, no pierdes el tiempo – me dice Mike con complicidad.

-¿De qué mierda estás hablando Zacharius?

-¡Ah! claro, hazte el tonto Levi... como si no lo notaras, esa chica está coqueteando contigo.

-Me tiene sin cuidado.

-Eres un maldito suertudo, y lo peor es que no lo mereces.

-Si, si... lo que digas. Desesperado.

-Oye, eso dolió imbécil. – se levantó de hombros – yo solo digo, que siempre las féminas parecen lanzarse a tus pies, y tú solo pones tu cara de duende gruñón.

La chica nos entregó las bebidas, pagamos y salimos de ahí. Mike tiene razón, no es que me interese jugar al Don Juan, en verdad que a veces detesto que algunas mujeres sean tan obvias. Mínimo deberían esperar que les muestre algo de interés ¿no? Aunque tampoco me interesa, ni tengo la paciencia para fingir que sí.

Vamos a clases, una vez pasadas las dos horas de tortura con el profesor "aburrido". A la salida siento que me pasan un brazo por los hombros, ruedo lo ojos, solo existe una persona en este mundo, con la osadía de mantener contacto físico conmigo sin mi consentimiento.

-Leviiii.

Suspiro hastiado – Hange.

-Oye, ¿supiste ya el resultado de las elecciones para presidente del consejo de estudiantes?

-...

-Bien, suerte que me tienes a mí – se señaló a sí misma con el pulgar mientras sonreía como la loca que es – déjame decirte que este año te han destronado Ackerman... nada más y nada menos que una novata.

Por un segundo, solo por un misero segundo, aquella declaración me sorprendió, pero luego adopto mi característico semblante de "me chupa un huevo tu comentario".

-Bien – es todo lo que contesto.

-Te vez preocupado Levi – suelta una risotada de lo más vulgar y molesta, típico de Hange – ¿qué te parece Mike? ¿Te imaginabas que este sería el año en que la nueva Ackerman destronara al imbatible "Kaichou" luego de tres años consecutivos? – le habla al rubio que camina junto a nosotros rumbo a la salida del edificio.

La mejor jodida persona del mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora