Como un padre

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¡Hoooola! 

E vuelto queridos lectores míos, ya se que me retrase un poco pero en fin el estudio me tiene looooooooooooooooca. Pero apuesto a que no quieren escuchar y solo quieren leer así que ignorando todo lo anterior lean y disfrute.

"Naruto no es mío, es de Masashi Kishimoto. La historia tampoco lo es, solo la publico para su disfrute"

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Capitulo 7.

Después de la dura batalla contra Zabuza, la aldea entro en cierto estado de paz, despidiendo a nuestros camaradas, ellos comienzan su camino para volver a konoha, su propia aldea. Ya era mas de medio día y ellos se aproximan a un pueblo cercano donde decidieron parar.

- muy bien chicos, les doy la tarde libre, descansaremos por hoy en este pueblo, así que pueden hacer lo que quieran, mañana en la mañana partiremos –dijo el sensei desapareciendo en una nube de humo y dejando a los chicos con una gota estilo anime en la cabeza-

- que bien!! Quiero almorzar!!! –pedía el rubio a gritos sujetándose el estomago-

- es patético, pero tiene razón, también me esta dando hambre –dijo el pelinegro en tono de fastidio-

- vamos a comer algo!! –grito el rubio tomando de las manos a sus compañeros y comenzando a correr- RAMEN!! –gritaba el rubio corriendo arrastrando a sus compañeros-

- NARUTO!!! –gritaron el azabache y la pelirrosa siendo arrastrados por el rubio, luego pusieron sus pies el tierra frenando al rubio y golpeándole en la cabeza-

- eso duele!! De veras que si!!! –se quejo el rubio llorando estilo anime-

-Naruto... me vas a hacer perder la paciencia una vez mas –advirtió la pelirrosa comenzando a tronar sus puños-

- n-no... tra-quila S-Sakura-chan –intentaba tranquilizar el rubio a su compañera-

- hmp, yo me voy –anuncio el pelinegro caminando en una dirección diferente-

- hare lo mismo, recuerda mañana en la mañana Naruto o te dejamos en la aldea –dijo la pelirrosa para después comenzar a caminar en otra dirección-

- diablos, y yo que quería comer con alguien –soltó con un pesado suspiro el rubio mirándose solo- oh bueno, no significa que no pueda comer –dijo ahora sonriente y comenzando a caminar buscando su tan preciado ramen-

- *creo que no resulto como esperaba* -pensaba con pesadez el jounin del equipo mirando como su equipo se separo- *primero tengo que ver donde están los otros*

***

Vemos a un azabache en el bosque, el cual estaba entrenando a subir arboles solo con su chacra, lo cual ahora estaba mejorando muchísimo, hasta que cierto ruido lo desconcentro y lo hizo caer de un golpe al suelo, el dolor no es exactamente lo que le molesta, si no que la causa del ruido era su estomago que le pedía algo.

- *ash, debí ir a comer algo, tengo tanta hambre que hasta pienso en haber ido con el dobe* -pensaba con cansancio el chico tomándose el estomago y cerrando los ojos tratando de calmar las ansias de ir con Naruto a comer ramen. Cuando abre los ojos vez delante de su cara un paquete de bolas de arroz dejándolo sorprendido, para luego mirar detrás de las delicias y ver a una pelirrosa quien les sujetaba- pensé que dije que quería estar solo –dijo con el ceño fruncido mirando a la chica-

- pues no, no lo dijiste, pero yo creí que tu si dijiste que tenias hambre –hablo la pelirrosa y lanza el paquete de bolas de arroz al lado del pelinegro- allí tienes –dijo la chica ahora subiendo por el árbol caminando normalmente-

El Rencor de los Ojos EsmeraldasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora