No sé cómo empezar esto, pero ya he empezado.
Seguramente tampoco sepa desarrollarlo, pero lo estoy desarrollando.
Escribo y desarrollo para vaciarme y llenar el vacío.
Palabras sin sentido que, escribo por escribir.
Y que hago por hacer.
Y digo por decir.
Y quiero algo por querer.
Y existo por existir.
Aspiro a más y me conformo,
con resignación,
por mi incapacidad de alcanzar un logro.
Que, incapaz me siento, no soy.
Y siento impotencia cuando, aunque no deba, sin que nadie lo note, hago notar mi ausencia.
Porque no debería no estar presente.
Y por más que no quiera, soy abstinente
a lo que tengo que ser.
Me gustaría poder aprender
porque;
No carezco de consciencia,
sobre mis propios pecados.
Aún así los cometo y
siento que quiero arrancarme la mente.
Dejarla hecha pedazos.
No sabía cómo empezarlo,
ni desarrollarlo,
y no sé cómo finalizarlo.
Y sin querer,
y a medio hacer;
como todo,
lo he acabado.
