Capítulo 17: Q for Quebec

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La nieve estaba cayendo.

A finales de diciembre, la ciudad de Quebec parecía un cuento de hadas blanco, un pequeño rincón helado del mundo, lejos de casa.

Realmente no habían planeado ir allí. Pero después de pasar las vacaciones navideñas y toda una divertida semana en Montreal con los sobrinos de Jongin, lo cual involucró muchos gritos de niños, correr mucho, mucho granizado y mucho de Jongin convirtiéndose en un bobo de la clase más alta, gastar una ridícula cantidad de dinero en juguetes que los niños eventualmente dejarían, ambos decidieron que necesitaban un tiempo a solas. Quizá un tiempo que implique menos azúcar y menos paseos en el hombro.

Había sido necesaria una llamada telefónica de Jongin para arreglar eso.

Le había tomado a Taeyong 20 minutos para devolver la llamada con su vuelo e información de hotel, así como también un reporte detallado del progreso actual del boceto de febrero.

Kyungsoo suponía que tenía que sentirse al menos un poco culpable por no hacer nada, y por simplemente disfrutar el tiempo libre. Sabía que estaba mal, porque habría muchísimo trabajo esperándolo en cuanto regresaran a Seúl.

Sin embargo, al ver las maravillosas vistas mientras el coche los llevaba del aeropuerto al hotel, las calles cubiertas de nieve y los cielos despejados, no se atrevió a preocuparse. Realmente no.

"Debimos haber venido aquí con los niños," Kyungsoo musitó cuando salieron del auto y escaneó la cantidad de nieve. "Les habría gustado."

La sonrisa de Jongin fue suave y pequeña mientras ponía una mano en la parte baja de su espalda y le daba un pequeño empujón, sus dedos rozaban sobre su palma. Sostenía su mano, su piel cálida y suave.

"La próxima vez."

La suite era grande y más importante – cálida. Era cómoda y bonita, y Kyungsoo solo quiso jalar a Jongin al sofá frente a la chimenea, cubrirlos a ambos con un cobertor y acurrucarse. Eso sonaba a un buen plan.

"¿Quieres cenar?" Jongin preguntó, quitándose el pesado abrigo.

Kyungsoo parpadeó. Cenar también sonaba bien. Echó una mirada al sofá. Quizá cenar, y luego acurrucarse. Eso también iba a estar bien.

"Claro," Kyungsoo se encogió de hombros, mientras Jongin lo acercaba. Alzó las manos, tomando los extremos de la bufanda de Kyungsoo. "He escuchado que hay tours de comida aquí. Así que aparentemente, hay muchos restaurantes tradicionales y buenos. Cenar suena genial."

No sabía si Jongin de verdad estaba escuchándolo o no mientras jugaba con su bufanda, pero estaba sonriendo de forma suave y eso fue suficiente para tener a Kyungsoo sintiéndose contento.

"De acuerdo," Jongin jaló su bufanda un poco más fuerte y el cuerpo de Kyungsoo se presionó contra el suyo. "Es una cita entonces."

Kyungsoo no pudo evitar el pequeño resoplido, mezclado con una risa, cuando sintió un ligero beso en la punta de su nariz. Arqueó las cejas ligeramente mientras sus manos bajaban del pecho de Jongin a sus lados.

"Hemos estado juntos por cuatro años. Creo que estamos más allá de eso. De las citas."

"Nada de eso. Estamos saliendo, ¿no?" Jongin pareció relajado cuando rio. Algo atontado, algo ido, pero en una muy buena forma que hizo que el corazón de Kyungsoo se agitara.

Un despreocupado Jongin, un Jongin cuya mente no estaba cargado con toneladas de trabajo, un Jongin que estaba mirándolo como si él fuera el mismo centro de todo el universo. Gravitando hacia él, sus manos sobre él, su rostro a centímetros más cerca con cada segundo.

The Devil's Black Card - KS (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora