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¿Que pasaría si Binghe no fuera tan fuerte?

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"Este maestro te promete que, incluso si algo sucede, no te pasará nada".

Luo Binghe no podía pensar en nada más que en esas palabras. Las palabras exactas de su Shizun. Su Shizun, que lo empujó al abismo en el segundo en que descubrió que era medio demonio. Esas palabras. Esas mentiras.

Eso fue todo en lo que pudo pensar cuando atravesó el abismo sin fin. Matando monstruos y demonios y buscando refugio en cuevas de la mitad de su tamaño. El abismo fue cruel e implacable. Magma quemaba por todas partes su túnica blanca y verde pálido. Su espada, Zheng Yang, se dejó en la parte superior con su Shizun.

Todo lo que puede pensar son esas palabras cuando su mente se volvió loca.

¿Shizun alguna vez se preocupó por mí? ¿O todo lo demás es mentira?

Quería respuestas. Esos pensamientos fueron los que lo llevaron a través del abismo, abriéndose camino por la vida. Debería haber sabido que el "nuevo" Shen Qingqiu todavía era cruel. Abrigándolo, atención, cariño, solo para tirarlo al abismo. Fue cruel a otro nivel. Prefiere ser golpeado antes que mostrarle afecto y luego ser traicionado.

Fue realmente un espectáculo lamentable. Incluso si pasó por todo el dolor, permaneció vivo, pensando en su Shizun que lo había abandonado. Se aferró a cada recuerdo de su Shizun, esperando sentir que todo esto era solo una pesadilla, y que se despertaría en su habitación lateral en la casa de bambú. Sus dedos trazaron la cicatriz en la parte superior de su piel que estaba sobre su corazón. Todo lo que puede pensar es en Shizun ... ¿Qué hice mal?

Se maldijo a sí mismo muchas veces. Si tan solo no estuviera tan desesperado por anhelar esa atención, nunca hubiera sufrido tanto. Si tan solo hubiera escuchado cada parte logística de su cerebro, que Shizun no cambió, no estaría sufriendo tanto de angustia. Prefiere sufrir una paliza que otra angustia. Era demasiado parecido a cuando perdió a su madre.

En los días en que no se escondía accidentalmente en una cueva llena de trampas, a menudo pensaba en su vida en Qing Jing Peak y se reía de lo estúpido que era. ¡¿Cómo pudo ser tan ingenuo ?! Confiar en el mismo hombre que le lanza miradas sucias, le sirve té caliente, lo encierra en un cobertizo y lo golpea sin fin. ¡¿Y luego fue a todas sus órdenes y llamó como un perro cuando cambió ?!

Se rió de sí mismo y de su estupidez. Su Shizun es demasiado implacable. ¿Por qué no golpearlo como antes si lo iba a abandonar? Eso habría sido más fácil de curar su corazón roto. Pero su Shizun lo ha tratado mejor que cualquier otro discípulo, lo ha cuidado y ahora su corazón estará roto para siempre.

Por el rabillo del ojo, ve a un niño pequeño con el pelo esponjoso atado en una cola de caballo. Su sonrisa triste y solitaria, el rostro amoratado, le quedó de su tiempo antes de que su Shizun cambiara. El niño era pequeño, tan diminuto. Se dio la vuelta y le sonrió a Binghe.

"¡Shizun es tan genial! Nunca lo odiaré, él me salvó después de todo." Dijo el niño. Su sonrisa era tan brillante y cegadora. Binghe no pudo evitar sentir arder el borde de sus ojos.

Tan falso.

"¿Qué pasa si Shizun no está allí un día?" Preguntó Binghe. El pequeño parecía confundido, lo miró fijamente por un par de segundos antes de responder con otra sonrisa brillante. Su rostro y su corazón son tan puros que le hace sentir como suciedad incluso estar cerca de él.