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El tierno soplido de la muerte

El hombre que alguna vez estuvo sosteniendo un arma delante de mi, apuntando directamente entre mis cejas estaba ahora con una perforación de cráneo que se situaba a un lado de su oreja en vertical, ignoro si la bala encontró su fin saliendo de el, estampándose en la pared de el fondo, o si estaría alojada en lo que le queda de cerebro.

No tuve mucho tiempo para pensar, de un cabezazo rápido golpeo a el hombre que tengo detrás, hundiendo su mascara dentro de su cara, encuentro un punto débil en su defensa que me tenía amarrado y consigo finalmente liberarme.

Tomo el arma que estaba junto al cadáver de el primer sujeto, la cual aun sostenía con su mano muerta y finalmente se escucha un silencio prolongado por 10 segundos, mientras estabamos quietos.

Es entonces cuando me doy cuenta que la chica que estaba "rescatando" portaba mi recien estrenada 9mm, la cual estaba humeando, caí en cuenta que ella había accionado el gatillo que me liberó de lo que seguramente sería mi muerte.

Regreso mi mirada hacia el tipo, el cual el sonido de la respiración que pasaba através de su máscara era agitado: Rápido e intenso.

-Quien eres y que hacían en mi casa?!- Pregunta la chica con desesperación, mientas yo imaginaba que le podría pasar a su padre, seguro lo úlitmo que pasaba por su cabeza en ese momento era su padre.

A la vez que ella dice eso el hombre muy velozmente toma un arma de la parte trasera de sus jeans azules y hace un disparo, igual de rápido, no alcanzo a reaccionar, pero la velocidad de el momento me ha hecho disparar el arma de el difunto. Los cuales ahora sumaban 2.

Cuando me doy cuenta, sentí un dolor agudo en mi brazo, el cual, empezó a sangrar y mucho, había recibido un disparo en mi hombro derecho.