Reencuentros y Guerras

935 103 12
                                    

Horacio se levanto de aquel sillón sintiendo su cuerpo adolorido, despertó cuando miro que sus piernas llegaban hasta el extremo de este, se toco su cabello notando que aquellos rizos que toda la comisaría amaba tocarlos era una cresta despeinada,...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Horacio se levanto de aquel sillón sintiendo su cuerpo adolorido, despertó cuando miro que sus piernas llegaban hasta el extremo de este, se toco su cabello notando que aquellos rizos que toda la comisaría amaba tocarlos era una cresta despeinada, miro su brazo notando sus músculos y el tatuaje que se había hecho, miro su ropa tenía una sudadera negra junto a un pantalón deportivo del mismo tono. Se levanto del sillón para colocarse unos zapatos que le habría dejado Michelle. Tenia que verla.

Busco su celular con la mirada para tratar de llamarle a la chica pelirroja que le había ayudado viendo que este número no contestaba o lo marcaba como fuera de linea. Después de hablaría con ella.

Salio de su oficina compartida con Gustabo para ir hacia donde tenían un armario con armas y algo de comida, se estiraba mientras escuchaba sus huesos crujir. Entro a aquel lugar notando que no estaba solo, su respiración paro cuando aquel sujeto lo miro y se quedo quieto al verlo. Volkov dejo caer una barrita de cereal al mirar al chico, su Horacio volvió a ser el mismo. Nadie supo pero cuando menos creían ambos estaban abrazados llorando en brazos del otro, todo estaría bien para ellos dos ¿No?

- Te extrañe Horacio...

- Yo tambien te extrañe Volkov

Ambos se separaron para el mayor tomar las mejillas del menor y dejarle un suave beso en sus labios sintiendo como era correspondido, los minutos se detuvieron para ellos tratando de degustar aquellos labios hasta que se separaron dedicándose una suave sonrisa, no era necesario palabras por el momento.

Ambos se separaron para el mayor tomar las mejillas del menor y dejarle un suave beso en sus labios sintiendo como era correspondido, los minutos se detuvieron para ellos tratando de degustar aquellos labios hasta que se separaron dedicándose una ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Habían pasado semanas intensas, entre peleas y constantes burlas hacia el de crestas, paso días en un suelo frío donde fue brutalmente golpeado por quienes se supone que era la mafia que confiaba en el. Apenas si recordaba algo de lo que ahí sufrió, su amada cresta fue cortada y apenas podía hablar con Gustabo, notando como este ya había cambiado demasiado y ya no era el. En el tiempo que estuvo hospitalizado conoció formalmente a aquella peli morada crush de su único amigo en comisaría.

Conway le aviso que en unos días mas y podrían desmantelar aquella mafia y podrían irse de vacaciones a otro lado, sonrió feliz aunque este no lo fuera en su interior.

Solo quiero ser Horacio | SpainRpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora