Styles's Histories [H.S]

013Dr. Styles

Lizzie comenzaba su primer día como enfermera en un hospital de Seattle.
Había terminado un exitoso internado en San Francisco y tenía un puesto seguro allí cuando egresará, pero decidió que era tiempo de volver a su cuidad natal y cuidar de sus padres de cerca.

-¿Quién demonios está a cargo de Jefferson Blake?-Preguntó Harry a la enfermera en el mesón central de pediatría-Deje explícitamente escrito que la medicación debía estar dentro de las venas de ese niño antes que despertara.

Harry no era un cirujano que gruñiera a enfermeras ni mucho menos un hombre difícil, pero su paciente de 5 años había despertado llorando de dolor alterando a los demás pacientes en la sala post operatoria.

-Lo siento Dr. Styles pero la señorita Karson es nueva y probablemente se ha extraviado buscando la medicación en la famarcia.-le intento explicar la enfermera sin titubear.

En el hospital Harry era el que sonrojaba a las enfermeras y lucia como el sueño de cada paciente femenina. No era extraño que el género femenino se sintiera avergonzado cuando lo tenían de frente.

-Es más, es ella Dr.-le señalo Sharon a una mujer que corria con prisa por el pasillo para llegar a la cama del paciente de Harry.

Pero las Vans que llevaba en los pies traicionaron a Lizzie enredándose sin querer justo antes de llegar a su destino. La charola con los implementos médicos que llevaba en sus brazos ahora yacia estrellada en el frío piso del hospital.

"Mierda van a hecharme en mi primer día" pensó con angustia mientras intentaba levantarse, ignorando la pena de ser el centro de atención en ese momento.

Unos brazos fuertes llegaron a levantarla y supo que era un hombre cuando su perfume le inundó el olfato, y olía jodidamente bien, incluso hizo que Lizzie se reprendiera por estar pensado en un hombre cuando sus ampollas con medicación debian estar en el piso hechas añicos.

-Asi que tú eras la enfermera a cargo de mi paciente-Le susurró suavemente el hombre que la ayudo a parar y por su bata supuso que era Doctor y peor aún el Doctor del paciente que había dejado esperando mientras se extraviaba en la farmacia buscando los medicamentos de él.

"Ahora sí estaré doblemente despedida" pensó Lizzie.

-Yo lo siento mucho, de verdad, me perdido y para colmo he roto las ampollas-Hablaba aceleradamente Lizzie entrando en un ataque de pánico.

-Vale ya, no pasa nada. La enfermera dijo que era tu primer día, y te ayudara a limpiar esto y a encontrar unas ampollas nuevas. No te preocupes.-le murmuró él Doctor con compresión cuando Lizzie pensó ya la hecharia a patadas por la puerta del hospital.

Lizzie creyó que había visto sus ojos verdes alguna vez, pero sabía muy bien que recordaría tales atributos si alguna vez le hubiera visto. Busco su apellido en la bata pero aún así "Dr. Styles" no se había topado con ella ntes en su internado, había oído hablar de él porsupuesto, no era para menos, era unos de los mejores en lo que hacía.

Pero Harry si la recordaba. Y lucia exactamente igual como lucia hace unos años. su cabello estaba mucho más corto que en la facultad, lo llevaba peinado en una media cola que dejaba a la vista sus delicados rasgos faciales.
Pero sus ojos seguian teniendo esa característica forma de parecer  somñolientos y risueños. Al igual que los tenis con un aire masculinos, que está vez eran reemplazados por unas Vans cerradas con diseño de ajedrez. Sonrió al pensar que le daba la misma impresión que hace 5 años, de ser una chica que literalmente se ponía lo primero que encontraba y no tenía la menor importancia en lucir zapatos diferentes cada día.

Pero esta chica no había llamado su atención solo por su particular sentido de la moda, si no por su coraje para desnudarse aquel día.

Hace 5 años el Doctor Claide tuvo la brillante idea de que los estudiantes de medicina de último año le hicieran la primera clase de anatomía a los enfermeros de primer año.
Aunque Harry sigue pensado que fue una brillante idea de parte del Dr. Claide para librarse de su trabajo como docente para asistir a una cirugía maravillosa para su carrera.

En un momento de la clase su compañero y ahora Dr. Kerd avanzo a la parte práctica del cuerpo y sugirió que algun varón se tendirá en la camilla con el torso descubierto para demostrar un procedimiento, pero los 5 varones en la clase se avergonzaron de sus torsos y se negaron a mostrarse sin camiseta frente a las 30 señoritas presentes.

Harry estaba a punto de ofrecerse como voluntario si eso ayudaba a los estudiantes a aprender, pero sin previo aviso una chica se paró al frente de la camilla quitándose la camiseta sin pudor alguno. Sus compañeros le silbaron fascinados, pero Lizie quito su sujetador sin titubear dejando sus senos al aire y los jadeos abundaron como gritos en el aula.

-Que unos pechos de hombre o mujer son exactamente igual y no deberían ser pudurosos si hay más de un varón en la habitación-Decia Lizzie mientras se sentaba en la camilla-Veremos culos y senos toda la vida siendo enfermeros, ya esta.-Añadio sin ningún rasgo de pudor en su cara, más que cabreo.

Harry penso que los pechos de Lizzie eran los más lindos que había visto jamás, no era por que fueran excesivamente grandes o bien parados. Era el hecho reconocer el coraje que corrió por su pequeño cuerpo para derribar estigmas.

-Ahora Dr. kerd con todo respeto ¿me permite ser su modelo anatómica?

-Que si...si-respondia el compañero de Harry con cuidado- Su nombre señorita modelo es...?

-Lizzie, Lizzie Karson Profesor.

En la universidad generalmente no era común que se usará una dama para demostrar procedimientos prácticos, ya que podían sentirse incómodas frente a la comunidad masculina que existiera en la sala. O podría prestarse para malos entendidos y reclamos.

Pero ese día Lizzie Karson cambio un poco el rumbo en que se había desenvolvido el pudor femenino frente a los hombres.

Harry pensó que está vez no la dejaría ir tan fácilmente, una mujer con coraje valía muchísimo. Y ya que el destino o sus trabajos los hicieron juntarse de nuevo, definitivamente no perdería la oportunidad de cortejar a la enfermera Karson.

-Te ví una vez en la universidad Lizzie Karson y probablemente no te acuerdes de mi rostro pero prodíamos conocernos-le ofreció Harry sin vacilar y Lizzie no hizo más que sonrojarse y aceptar la propuesta de conocer al Dr. Styles.