Erchel (ErnestoxRachel)

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Por si no lo saben Ernesto es el nombre que le puse al hijo de NorEmma, tiene cabello blanco y ojos verdes y Rachel obvio la conocen, cabello negro y ojos azules, tienen 20 años para que sepan

Era una noche lluviosa en la hermosa ciudad de Nueva York, las gotitas caían traviesas empañando los vidrios de aquel pequeño y modesto departamento, donde la mujer de aquel hogareño lugar preparaba la cena en espera de su esposo; el sonido de la puerta y unos pasos la alertaron.

—Ernesto ¿eres tú? —preguntó desde la cocina empuñando un sartén –

«Gracias Rapunzel »

—Sí, mujer, soy yo —habló él—

Rachel se tranquilizó y dejó su  “arma letal ” sobre la estufa y salió a recibir al albino, Ernesto estaba parado en el umbral de la puerta sacándose los zapatos, que por cierto estaban llenos de lodo —seguramente está al borde de el colapso —pensó ella divertida — su saco también estaba mojado aunque no tanto, solo unas leves gotas, por otro lado su camisa gris estaba impecable como siempre sin mencionar que a sus perfectos cabellos los adornaban pequeñas y cristalinas gotas, como si le hubieran soplado polvo de diamante en el cabello blanco.

Él la miró sorprendido y luego desvío la mirada un poco colorado.

—¿Que me ves? —preguntó un poco incómodo

—Te ves sexy cuando te enojas -dijo mordiendo sus labios, amaba molestar a su tierno esposo-

—R-Rachel -dijo rojo-

—Además que estas hecho un desastre

Dijo ella entre risitas y él la miró mal

¡Claro que sabia que estaba hecho un mendigo!

¿por qué?

¡Porque ese día no podía pasarle otra cosa mala!

Primero: se le hizo tarde en el trabajo ya que el imbécil de su tío Nat —Sí, trabajaba con su tío — le pidió a ultimo momento que llenara papeleo, naturalmente el albino se iba a quejar pero el segundo al mando en la empresa, Phil, también le pidió por favor que lo hiciera ya que ellos tenían una reunión o algo así recordaba él.

Segundo: por salir tarde lo dejó el tren y considerando que él se iba siempre en el último no había esperanza que otro llegara allí hasta mañana, tuvo que caminar hasta la estación de autobuses, según la radio se acercaban un mal tiempo debido a que los coletazos de un huracán sacudirían NY aunado a la tormenta eléctrica, mientras preocupado pensaba en eso sintió como su medio de trasporte dejaba de andar, el autobús se había quedado sin combustible, tuvo que caminar.

Tercero: cuando iba caminando un idiota en un auto salpicó los restos de agua que tenia la calle sobre el pantalón de Ernesto, así que echando humo por las orejas y tratando de no gritar cosas siguió caminando.

Cuarto: Empezó la dichosa tormenta, por suerte estaba cerca de casa y no se mojó mucho.

Sí, definitivamente nada mas le podía salir mal.

Rachel escuchaba con atención lo que el mayor le contaba con tanto fastidio, se quiso reír, pero eso no era recomendable considerando el estado de animo de Minerva, aunque por un momento se preocupó ¿pensaría Ernesto que aquella noticia seria la gota que se derramaría del vaso de las malas noticias?

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⏰ Última actualización: Nov 04, 2020 ⏰

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