La mañana es cálida y la luz del sol crea un suave resplandor dentro del apartamento. Seokjin vierte café en dos tazas, pone azúcar y leche en una y deja la otra negra. Es silencioso, pacífico y debería arrullar a cualquiera para volver a dormir, pero su mente está demasiado ocupada con pensamientos y hay voces en su cabeza peleando, peleando, peleando.
Seokjin siente la presencia de Yoongi incluso antes de que el otro pueda darse a conocer. Camina detrás de Seokjin y pone sus brazos alrededor de su cintura. "Buenos días, hyung", susurra Yoongi en la espalda de Seokjin, el pecho vibrando con su voz profunda.
No fue tu culpa.
Lo es, lo es.
La otra voz gana, con bastante facilidad. Y tiene que ser mañana, piensa Seokjin. No hay otro momento que mañana. Namjoon y Hoseok no estarán en el apartamento, y Yoongi generalmente duerme hasta tarde los domingos. Respira hondo y golpea la encimera con la punta de los dedos para permanecer en tierra.
Seokjin pega una sonrisa en sus labios y se da la vuelta. "Buenos días, Yoongichi", susurra mientras aparta el cabello suelto de la cara de Yoongi. "¿Por qué estas despierto tan temprano? Iba a llevarte el desayuno a la cama."
Yoongi se encoge de hombros. "Olí el café."
Seokjin levanta una ceja. "¿De verdad? Pero cerré la puerta del dormitorio."
Yoongi lo mira fijamente, con los ojos todavía medio cerrados, y luego entierra la cara en su pecho. "Bien", murmura. "Me desperté y no estabas allí. No pude volver a dormir."
"Aigoo, Min Yoongi", arrulla Seokjin y le planta un beso en la parte superior de la cabeza. "Tan dolorosamente lindo en la mañana", bromea mientras envuelve sus brazos alrededor del más joven, balanceándolos juguetonamente de lado a lado con música inexistente, sus pies descalzos golpeando el suelo.
"¿Dónde está mi café?" Yoongi refunfuña mientras se aleja para mirar a Seokjin.
Seokjin sacude la cabeza. "Déjalo enfriar, te haré un nuevo lote." Tira de Yoongi de vuelta y apoya la barbilla en su hombro. "Permanezcamos así por un tiempo, ¿okay?"
"Hyungie", le susurra Yoongi al oído, la voz tan baja que Seokjin casi no la oye. "¿Estás seguro de que estás bien?" pregunta. Seokjin cierra los ojos y tararea. Es cada vez más difícil mentir a medida que pasa el día.
"Estoy bien, Yoongichi", responde.
En su cabeza, Seokjin corea la primera de las mil disculpas que hará durante los próximos tres años.
*****
Yoongi se despierta con el olor a café. La cálida sensación comienza a subir por sus huesos incluso antes de que pueda saborearla. Mueve la cabeza y flexiona los dedos, pero en lugar de que la comodidad se abra paso a través de sus músculos, llega una oleada de pánico. Abre los ojos y se encuentra solo en el sofá. Solo otra vez.
"Hey."
Yoongi gira la cabeza y deja escapar un suspiro cuando ve a Seokjin junto al fregadero de la cocina, sirviéndose una taza de café. Observa al otro caminar hacia él y Yoongi toma el café en sus manos distraídamente, todavía mirando a Seokjin que está sentado en la mesa de café frente a él.
Yoongi parpadea. Seokjin prometió quedarse, y está aquí dándole café. Le sonríe a Yoongi y extiende su mano. "Estás bien ahora, creo", dice mientras quita el parche de enfriamiento de la frente de Yoongi. "¿Cómo te sientes?" pregunta. Yoongi mira fijamente el rubor en las mejillas de Seokjin. Recuerda haberlos visto de cerca anoche, recuerda que sus labios estaban peligrosamente cerca de los suyos.
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Heists and Hearts | ksj + myg
Fanfic"Dame un número", dice Yoongi cuando Namjoon finalmente se da vuelta en la silla de su computadora. Namjoon lo mira y suspira. "Uno." No es la primera vez que se queda perplejo con un plan. Namjoon mira a Yoongi con los ojos fijos en él como un ha...
