A picture, a pair of green eyes and a lovely Smile.

113 5 0
                                    

Navegar por la vieja rutina, mañanas, tardes y noches de las cuales deseaba escapar, noches iluminadas por la luna llena a través de una ventana que deja entrar doce centímetros de cielo. Noches que más tarde aprendería que debí apreciar más, Noches que desearía recuperar en un futuro no tan distante.

Una de esas noches decidí hojear el catalogo de fotografías. Mi dedo y ojos danzaban de izquierda a derecha, izquierda a derecha, ¿Sería otra noche en la que me cuestionaría el porqué seguía intentando? Estaba a punto de perder el interés e ir alguna actividad lúdica que rompiera con mi energía y me dejará descansar, cuando un par de esmeraldas cautivaron mi mirada.

¿Es demasiado? Me pregunté, mi falta de autoestima, mis miedos... ¿Cómo una chica tan linda se podría fijar en una chica como yo? Su sonrisa, sus ojos, su belleza, No sabía nada de ella y la descripción dentro de su registro no me decía mucho, ¿Qué puedes perder? De todos modos nunca sabrás si te rechaza.

Después de pensarlo un tiempo, decidí aplicar la solicitud, Nada podía salir mal, una de las ventajas de este siglo, si tienes miedo al rechazo ¡No te preocupes! Tenemos la solución con nuestro amplio catalogo de personas nunca sabrás cuantas de ellas no te consideran linda, solo te avisaremos de las que quieran algo de ti.

Un mundo frio, si te pones a pesar, un mundo frio, donde un corazón romántico busca un símil con quien llenar sus fantasías. Los ojos bonitos, cautivadores y esa sonrisa seguían inundando mi cerebro. ¿A caso era un estúpida?  ¿Cómo era posible que alguien que no conocía pudiera provocar tal sentimiento en mi?

"Tu solicitud fue aceptada, puedes charlar con la persona elegida" Emoción, Sorpresa, ¿Felicidad? Trate de llevar la conversación sin parecer una completa idiota... Spoilers no lo logré. Con suerte la dueña de los ojos color esmeralda y sonrisa bonita, considero la charla agradable.

Intercambiamos gustos musicales, comida e historias, Su manera de expresarse, sus mensajes, la incertidumbre que había creado en mi cabeza, había cambiado a un estado de paz, el charlar con ella me provocaba una sensación de tranquilidad.

Intercambiamos perfiles sociales y nos enteramos que estudiábamos en la misma universidad, Era demasiado bueno para ser verdad, pero en ocasiones el mundo, el universo, la vida decide alinearse de manera en que algo bueno sucede.

Y así lo fue, yo cursando mi último año como senior, ella empezando su aventura universitaria. A pesar de estar en la misma facultad nuestros horarios distaban de concordar, Entre mis practicas de servicio, nuestros horarios quebrados y la velocidad a la que circulaban nuestras rutinas ese esperado encuentro se prolongaba más que la espera para una consulta en el seguro.

La rutina se había vuelto tolerable, disfrutable y amena. El hablar con ella sobre mi "trabajo" y sus clases, conocer más de ella y ver reflejado un genuino interés en escucharme hacían que mis turnos de 15 horas en la facultad fueran más amenos.

De pronto, una fotografía, un par de ojos verdes y una sonrisa adorable, habían traído un poco de felicidad a mi vida...

Cartas de amor a una extrañaWhere stories live. Discover now