Micro Cuentos

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Seducir es todo un arte, es necesario ingenio, paciencia, imaginación, sutileza, entre otras cosas para llevarlo acabo correctamente, por esto mismo es que no a muchas personas se les da bien, si vemos gran cantidad de supuestos seductores es porque las "víctimas" simulan el efecto de una seducción efectiva, esto por diversas motivaciones personales, aunque este no es el caso. Como decía, el seducir puede traer beneficios como problemas, aunque en mi caso esto último nunca se ha dado, ya que cada acto que hago está perfectamente planeado y pensado, a tal punto que absolutamente nadie logra percatarse en qué momento sus amigos caen en mi juego, ni dónde son llevados por mí con palabras atrayentes para esa persona.
La rutina es siempre la misma, primero elijo un objetivo, la apariencia me es indiferente, no tengo preferencias en estas cosas, todos son iguales y terminarán de igual manera en mi hogar haciéndome pasar un buen momento, aunque a veces es algo breve debo decir.
Lo segundo en la lista es asegurarse de que el objetivo no esté sobrio, que no esté en un sitio de difícil salida para poder llevármelo o por si las cosas se complicaran, aunque esto lo veo un tanto imposible. De igual manera hay que asegurarse de que nadie esté al pendiente del objetivo, ya que no deben quedar testigos de mi perfecta estrategia de seducción o esta ya no será efectiva.
En tercer lugar me acerco a mi sujeto de interés de esa noche, entablo una conversación casual con las frases que ya tengo memorizadas haciéndolas sonar naturales, les sigo el juego con su coqueteo barato mientras simulo un aumento de mi interés hacia su persona, para que luego de aumentar su confianza en mí, arrastrar ese cuerpo lleno de alcohol a mi casa.
Al llegar comienza mi parte favorita y la última fase de mi plan brillante. Para comenzar me acerco y le beso para alivianar el ambiente. Luego de que surja efecto simulo sentir atracción hacia ejercer una posición dominante y nos dirijimos a un cuarto cuidadosamente ordenado.
Al entrar allí, se acuesta en la cama y sin previo aviso, ignorando todo lo que ocurre de manera intermedia, llegamos a la parte que tiene mi mayor interés, la cual demuestra que en verdad disfruto lo que hago. Esta parte tan especial para mí es el momento de limpiar todo, es importante hacerlo bien o todo lo hecho se estropearía, en verdad yo no tengo preferencias en cuanto a personas, después de todo, los cráneos son iguales, hermosos y una colección única, la mía es extensa y brillante, ya que los mantengo con cuidado.