🏈| 2. Willa Hill es una víbora

1K 152 163
                                    

"L'abito non fa il monaco"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"L'abito non fa il monaco"

(El vestido no crea al monje)

(El vestido no crea al monje)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

14 de enero de 2016

En sus ojos marrones se podía ver las más oscuras intenciones. Su cabello largo y negro era como un manto de perversión que enmarcaba su delicado rostro de mentirosa. Sus labios eran gruesos y engañosos, susurrantes de las más viles mentiras. Su apariencia era sencilla de describir: un lobo con piel de cordero.

Willa me observó con una sonrisa antes de aproximarse a mí con paso seguro. Tenía buen caminar, era erguida y tenía una cadencia en las caderas envidiable para cualquier mujer. Y, ¿para qué ocultarlo? Su trasero era una belleza. La maldita estaba bien buena.

Se detuvo frente a mí con su característica pose altanera. No perdí mi sonrisa, sabía bien con quién trataba, qué era lo que la motivaba: secretos.

-Hoy pareces un poco pendiente de mí, ¿acaso me has agarrado cariño, Moore? -inquirió aproximándose un poco más.

-He oído que preguntas por mí -puntualicé, pero su sonrisa no se borró, como si esperara que esa fuera mi respuesta-, ¿ya no parezco tan repugnante como decías?

Willa ensanchó su sonrisa mostrando sus prolijos dientes blancos, aunque me tomó más por sorpresa sentir sus dedos recorrer mi brazo con suavidad. La cercanía y la seducción era lo que ella usaba para intimidar.

-Creo que me debes un favor -murmuró haciendo que frunciera el ceño. La única vez que le había pedido que hiciera algo fue hace tres años y se negó en rotundo, pese a que le ofrecí bastante dinero por ello-. No creo que quieras seguir intimidando a mis clientes -dijo, esa vez su mano se deslizó hasta la mía y dejó un papel sobre ella para luego alejarse-. Creo que deberías saber que Matt ha vuelto a comprarme.

Apreté la mandíbula. Estúpido Matt. No sabía dónde se estaba metiendo. Willa pareció notar la tensión en mi cuerpo porque me observaba con deleite.

-Hay algo que quiero -confesé al fin.

-Cuidado con lo que deseas, Moore -advirtió socarrona.

Sonreí.

1. ¿Qué pasó con Odell Taylor? (✔) #EVQNUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora