Retorno

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* Disclaimer: Todos los personajes son propiedad de Kishimoto*

Sakura salió de la bañera una vez, caminó hasta la cama comenzó a secarse el cuerpo y colocarse crema corporal mientras pensaba que ponerse, últimamente su guardarropa  había agregado varias prendas vestidos, blusas y faldas nuevas aunque como Kunoichi no usaba muchos de estos ahora que salía más seguido los necesitaba, se decidió por un vestido blanco floreado de tirantes ceñido hasta la cintura que le llegaba a la rodilla, camino frente al espejo, Sarada había ido de misión así que se ausentaría por 3 días a lo menos, bajo las escaleras, tomó sus llaves de un mueble apenas alcanzo a girar cuando escucho el sonido de algo caer y quebrarse, con si suerter lo había empujado, la reconoció enseguida, era una foto familiar, la única que tenían y que de hecho no era tal cual eso, eran solo fotos sobrepuestas, recordó lo que eso había provocado. Tomo las fotos, observó la de Sasuke siempre con esa mirada fría e intimidante, las metió en un cajón junto con el marco, recogió los vidrios rápidamente y mientras lo hacía caía en cuenta de lo que estaba haciendo no es que fuera estúpida pero no pensar en ello era más sencillo.

Después de aquel encuentro con Kakashi la pelirrosa había tomado su decisión, dejaría que las cosas con Naruto fluyeran seguramente tendría suficiente tiempo para decantarse completamente por él, solo tenía que esperar para que Sasuke estuviera en una aldea cercana o incluso en Konoha su cara mostró una sonrisa como las de Sai tan solo de pensar en eso, de nuevo él pasaría por alto a su familia y entonces solo tendría que decirle que ya no seguirían con esto y entonces sería libre. Si, con  el uzumaki las cosas iban bien, se veían siempre que el nuevo equipo 7 tenía misión, siempre en el antiguo departamento de Naruto,  no importaba que hicieran él siempre la hacía reír, ella cocinaba a veces para él aunque no creía rivalizar con Hinata el rubio siempre la  alababa, a veces dormían juntos sin embargo Naruto había respetado la línea que habían marcado, no se habían besado ni mucho menos tenido relaciones sexuales, era increíble como su intimidad iba más allá de eso.
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- Bien entonces ¿estás lista?
- Naruto seguro que no nos descubrirán
- Confía en mi, todo saldrá bien.
Ese día era especial porque era la primera vez que se decidían a tener una cita en otro lugar, para la apariencia física bastaba con un jutsu de transformación y para la voz Sakura había encontrado una planta que provocaba un efecto de cambio de voz por algunas horas. Cómo a pesar de tener libre tránsito por las diferentes aldeas se tenía que hacer un registro decidieron hacerse pasar por visitantes del país de las olas amigos del hokage.

Naruto uso el hirashin no jutsu para hacerlos aparecer en la estación de trenes, dónde registraron su entrada, caminaron hacia el restaurante pero cuando estaban por llegar el rubio jalo un poco del brazo a Sakura hacia otro lugar.
- Oye el restaurante queda hacia el otro lado ¿A dónde vamos?
- He querido darte un regalo apropiado y he notado que ocupas cosas de aquí
- ¿De qué hablas? No necesito un regalo.
- Yo quiero dártelo, no sé si es por mi pero es imposible no ver lo bien que te ves con todo lo que sale de esta tienda.- se pararon frente a una tienda de ropa, la misma dónde compró el vestido rosa y efectivamente Sakura había adquirido varias prendas en días recientes.
- Na... Menma gracias pero no puedo aceptarlo, ¿Qué pasa si después alguien me ve con esa ropa? Sabría dónde la compré y aunque no sospecharan de tu yo real bueno ya entiendes.- La ropa de aquel lugar era exclusiva y en efecto cualquiera reconocería una de sus prendas.
- Te dije que no te preocupes.- la tomo firmemente y la introdujo en la sucursal.

- Buenas noches soy Menma Katski, tengo entendido que el hokage ya les había avisado que vendríamos.
- Señor Katski, señora porsupuesto permítanos un momento.- las empleadas colocaron el letrero de cerrado.
- Bien la ropa supongo que es para su esposa ¿cierto?.- Sakura se puso como tomate.
- Desafortunadamente está equivocada si bien si compraremos algunas cosas para ella, en realidad queremos un regalo para una amiga, pronto es si cumpleaños y aprovechando que estamos en la aldea queremos hacerle un regalo. Probablemente la conozca es la jefa del hospital.
- Oh la señora Sakura Uchiha.- Naruto arqueó las cejas apenas un instante
- Si, en efecto.
- Entonces será algo fácil, ha venido últimamente así que ya conocemos su talla y sus preferencias de color y estilo.- Sakura estaba todavía algo atareada, y el hecho de ver a un pelirrojo enfrente de ella en lugar de un rubio no ayudaba.

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