Me dolía mucho mis párpados, pero quiero abrir ya mis ojos, no soporto mas este dolor en mi cabeza.
Desperte en un lugar que no conozco pero me daba una idea que en donde estaba, si así es estoy en un hospital. Que me habrá pasado para terminar aquí. Lo primero que vi fue a un chico alto, con pecas, cabello verde, rizado. Esta sentado en el sillón viendo hacia arriba, cuando volteo a verme abrió los ojos como platos.
— Ochako que bueno que despertaste — me dijo levantándose del sillón para acercarse a mi.
Pero quien es el, por mas que quiero no lo recuerdo.
— Perdón pero ¿quien eres tú?
— Eh? Ochako soy yo midoriya izuku, Deku... Tu hermano mayor.
— Perdón señor, pero no se quien es usted, ni siquiera se quien soy yo — dije para incorporarme en la cama de hospital.
Al decir eso vi entrar a la habitación a un doctor, una chica de cabello corto color rosa e igual que su piel. A otro chico igual de alto, cara seria pero su cabello es muy peculiar para mi, del lado izquierdo es color rojo y de lado derecho blanco e igual sus ojos uno es azul y el otro es gris. Atrás de ellos dos esta otro chico igual de alto, cara de enojado, ojos rojos como la sangre, cabello rubio cenizo.
— Doctor que bueno que esta aquí, me puede decir que hago aquí... Y quienes son ellos o quien soy yo. No recuerdo casi nada. — Al decir eso los tres chicos que acaban de entrar abrieron sus ojos sorprendidos
— Mochi... Como que quienes somos, no nos recuerdas, soy shoto.
— Perdón señor pero no se quienes son ustedes — Dije viéndolos a cada uno de ellos.
— Cara de ángel soy yo, no me recuerdas, tu y yo estamos casados.— dijo el chico de ojos rojos, haciéndome sorprender mucho por su aclaración
— Jaja casados, ahora si te importa tu matrimonio — oi decir al chico de cabello bicolor
— CALLATE MIERDA
— Shoto - kun de que estas hablando — le preguntó el chico llamado deku al chico de cabello bicolor
— Que te lo diga bakugou
— Kacchan De qué está hablando shoto
— Nada, eso no importa ahora
— ¿Qué no importa Bakugou? Dile por qué ochako te cito hace tres semanas en una cafetería, el día del accidente de ochako. Dile a Izuku como la lastimaste
— CALLATE MALDITA SEA, eso no te importa, metete en tus propios asuntos.
— Kacchan de que están hablando — pregunto el peliverde.
— MIERDA deku.
— Oigan si van a discutir por favor háganlo a fuera, necesito revisar a la pasiente y hacerle unos análisis para saber que es lo que ocurre.
Al decir eso todos se retiraron afuera y no los volví a ver en todo el día asta la mañana siguiente.
El tal deku estaba algo lastimado de la cara con golpes en cara y un parche en la mejilla izquierda.
Al entrar a mi abitacion lo primero que hizo fue ir a abrazarme y decirme.— Perdón por no protegerte... E fracasado como tu hermano mayor.