"Adiós, mi viejo amor"

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Sinopsis:

El alquimista Gastón Oak, había experimentado con niños de pueblo Paleta, sobre todo en su hijo Shigeru, para seguir con su papel como el mejor alquimista de la región.

Ahora, Gary esta buscando la forma de regresar a esos niños a la normalidad, negando a tomar parte de eso al sentir culpa, cargaría con el pecado de su padre para saber que no hacer con la alquimia.

Palletshipper, Vamo' a llorar con esto ;w;

~~[...]~~

El Lucario golpeo fuertemente al Mew dejándolo en el suelo, este permaneció en el mismo lugar, sintiéndose impotente.

—¡Tu no tienes la culpa! —el azulado le grito.

—Si la tengo... —mordió su labio inferior —Si no hubiera sobrevido, nada de eso hubiera pasado.

Los ojos castaños del canino mostraron sorpresa de aquel pensamiento. Agitó su desenredado cabello al no saber que responder.

—¡No, solo tu padre tiene la culpa! —lo tomó obligando que sus ojos verdes lo mirarán directamente —¡Y si fuera así, también soy culpable de que el este muerto!

Las orejas del felino bajaron. Si, su padre estaba muerto, pero nunca lo conoció, en cambio si que conoció el padre del Lucario presente si que lo conoció, pero el tuvo un desenlace trágico por proteger a su hijo y su gente. El señor Aaron, nunca fue juzgado ante la muerte de Gastón, nadie lo juzgó.

—El hizo un favor, posiblemente hubiera seguido con esto —miro sus patas.

—Solo... No te culpes más de eso, no es tu culpa —lo miro de manera suplicante.

Con un suspiro de rendición, aceptó la petición del aventurero Lucario. Obtuvo una gran sonrisa del azulado, el cual no dudó en abrazarlo, correspondió con ayuda de su cola. Se separaron para el disgusto del felino, y en esos momentos, el originario de Sinnoh se dio cuenta de lo cercano que era el amanecer.

—¡Ah! ¡Ya es muy tarde! ¡Nos vemos Gary! —se despidió empezando a correr. Tropezó con una raíz pero rápidamente se puso de pie logrado hacer reír al felino.

—¡Nos vemos Ash-boy! —miro feliz la energía del tipo lucha y acero.

Soltó un suspiro al ya no verlo. No estaba feliz de estar separado de su mejor amigo... Del único humano que era amable con él, bueno, prácticamente humano.

    — (...) —

—Ahhh, no se que hago aquí —soltó un suspiro al ver que estaba en el tejado del laboratorio Sakuragi.

Miro a su mejor amigo entrenar con aquel Riolu, se le notaba muy feliz con el azulado menor. Cerro los ojos unos momentos, recordando los momentos felices después de tanto dolor y sufrimiento, recordó la mirada de culpabilidad en los ojos azules de aquel hombre, para su suerte también recordó los entrenamientos del Lucario y Alakazan del padre de Ash. Gracias a ellos ambos pueden controlar sus poderes sin hacer daño a nadie, ni a ellos mismo.

SatoGou Story'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora