Erza x Evergreen

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P.O.V de Erza

¿Cómo es posible que ella sea la persona que tanto tiempo llevaba buscando? Si, sé que tuvimos una pequeña pelea cuando Laxus se reveló contra nosotros, pero ahora después de tanto tiempo, él volvió y su equipo se reunió de nuevo.

Pero hay un problema, que hay una persona detrás de ella. ¿Me estaré enamorando de ella? No estoy segura, pero sé que no puedo dejar que Elfman me la quite. No sé si esto es amor, pero debo evitarlo, no quiero separarme de Evergreen.

Poco a poco, me fui enamorando de ella, no podía soportar verla con Elfman, con Laxus y el resto, si ya que ella no siente nada por ellos; de ellos no me preocupo, es de Elfman del que me preocupo. No debería dejar así las cosas, debo hablar con Evergreen y por lo menos preguntarle si le gustan las mujeres. Pero, ¿acaso podría decirle eso? No Erza, no debes hacerlo, no querrás espantarla, ¿verdad?

Esa misma noche cuando estábamos en Fairy Hills, yo estaba por acostarme pensando en Evergreen y sobre que debería decirle, no puedo pedirle consejo a nadie, ninguna de ellas sabe esto, esto es algo que debo hacerlo sola.

Al día siguiente, el equipo de Laxus se iba a ir a una misión, pero Evergreen no estaba con ellos, lo cual era raro. Me acerqué a ellos y les pregunté por ella.

-No lo sabemos-respondió Bickslow-Lleva desaparecida desde ayer por la noche. ¿No volvió a Fairy Hills?

Que yo sepa, si, pero, aquí hay algo raro. ¿Cómo puede llevar desaparecida si la vimos todos ayer?

-Si la encuentras, dínoslo, ¿de acuerdo?

Le respondí afirmativamente a Laxus y se fueron la misión solo ellos tres. Mientras tanto, yo no paraba de darle vueltas a la desaparición de Evergreen. Les pregunté a todas las chicas que residían allí.

-Yo si que la vi-dijo Levy-Salió muy por la noche a tomar el aire, al parecer no podía dormir.

-¿Volvió a entrar?-pregunté.

-Eso ya no lo sé-fue la respuesta de Levy-Porque tras verla me fui a dormir, lo siento, Er-chan.

-No pasa nada, agradezco la información.

Al acabar el día, volví a la residencia para encontrar pistas sobre Evergreen, pero no encontré nada, también miré en su habitación por si estaba durmiendo, pero no estaba allí. No puedo darme por vencida, debo encontrarla, su equipo está muy preocupado por ella y yo también.

Por hoy, no encontré nada, así que lo dejé por hoy y me fui a acostar, espero que estés bien Evergreen.

Al día siguiente, en el gremio ya se había iniciado la búsqueda de Evergreen por parte del Maestro y de Laxus, pero no hubo tiempo de partir puesto que ella apareció por la puerta totalmente magullada. Laxus y yo corrimos hacia ella.

-¡Evergreen!-exclamé-Menos mal que estás bien.

-Tan bien no está Erza-me cortó Laxus-¿No ves que está herida?

Ahí lleva razón, la mujer de la que se supone que estoy enamorada estaba herida, como pille al que la haya hecho esto, lo pagará.

-¿Dónde has estado estos dos días?-pregunté preocupada.

-No...no lo sé-respondió ella malherida-Solo recuerdo que alguien me secuestró...

¿Que, la secuestraron? ¿Quién ha sido capaz de hacer esto?

-Hace dos noches estaba tomando el aire fuera de Fairy Hills y saludé a Levy.

Bien, eso significa que Levy si que la vio.

¿Y después?-preguntó Laxus.

-Cuando perdí a Levy de vista, sentí a alguien por detrás, me noqueó y cuando desperté estaba en un sótano oscuro.

-¿Viste a tu atacante?-pregunté tratando de sacar más información.

-No-respondió ella-Pero sé que era un hombre, debido a la fuerza que tenía.

Así que un hombre, no creo que sea él, pero necesito más información para encontrar un culpable.

-Ven-dije-Te llevaré a la enfermería.

-Gra...gracias Erza-balbuceó ella con una voz un poco débil.

Cómo pille al desgraciado que le ha hecho esto a mi amada, juro que no se lo perdonaré. Por suerte, solo eran magulladuras leves y no corría peligro.

-Ever-dije-Déjame protegerte, juro que acabaré con ese tío.

-No hace falta Erza, sé cuidarme solita.

-De eso nada, con alguien acechándote, no puedo quedarme quieta, estoy muy preocupada por ti.

-La verdad es que prefiero que me proteja mi equipo, me sentiré más segura.

-Laxus me ha dicho que lo haga yo, lo ha hablado con el Maestro y le parece bien.

-Bueno, si lo ha dicho el Maestro, no puedo oponerme.

Gracias Laxus, te lo agradezco de corazón, haré lo posible por protegerla y librarla de ese tío. Y así, me convertí en la guardaespaldas de Evergreen, donde iría ella, iría yo, salvo cuando vayan de misiones que irá con Laxus y su grupo. Mientras estaba de misión, yo investigaba al hombre que hizo daño a Evergreen, podría ser cualquiera, incluso Elfman, el hombre que está detrás de mi amada.

Pasaron los días y el culpable no aparecía, pero yo no me separaba de Evergreen, cada vez me enamoraba más de ella y creo que ella también está cambiando sus sentimientos. Un día, mientras ella realizaba una compras, yo vigilaba para que nadie la secuestrara, cuando vi a alguien camuflado entrar a la tienda y acercarse a Evergreen. Yo entré rápidamente y agarré del brazo al desconocido y lo tiré al suelo.

-Enséñame quien eres-dije.

Cuando descapuché al fornido hombre, descubrí que era Elfman. Tras sonsacarle información, ambas descubrimos que fue él quién la secuestró para hacer el clásico "Síndrome de Estocolmo", secuestrarla y hacer que se enamore de él estando cautiva.

-Perdiste la cabeza, Elfman, eso no es amor, es obsesión enfermiza.

-¿Y por qué tienes que estar tú con ella? Desde que la proteges, no puedo hacer nada.

-Elfman, ¿saben tus hermanas lo loco que estás?

-No y no deberían saberlo. Déjame estar con Evergreen y volveré a la normalidad.

-No Elfman-intervino Evergreen-Necesitas un psiquiatra, tú no estás bien.

Elfman se zafó de mi y nos atacó a ambas, cuando fue interceptado por Mirajane y Laxus.

-¡Marchaos las dos de aquí!-gritó Mirajane-Mi hermano ha perdido los estribos.

Cogí a Evergreen del brazo y nos marchamos de allí, rumbo a Fairy Hills, tras la carrera, ambas acabamos agotadas.

-¿E...estás bien?-pregunté jadeando.

-S...si-farfullaba ella.

Cuando descansamos lo suficiente, yo la miraba sonrojada y ella también tenía un pequeño sonrojo en las mejillas.

-O...oye Erza, quería darte las gracias por protegerme. Y pensar que Elfman acabaría así...

-No deberías darlas, a fin de cuentas quería hacerlo.

-Muchas gracias Erza.

Y de repente, ella me besó en los labios, yo se lo correspondí abrazándola por la cintura. Al fin, por todo esto, había logrado mi objetivo, conquistar a Evergreen. Cuando nos separamos, nos miramos por un rato y sonreímos. 

-Me gustas mucho Erza, ¿quieres salir conmigo?

-Por supuesto, Evergreen-respondí felizmente.

-Llámame Ever-dijo ella tocando mi nariz.

Nos volvimos a besar y nos convertimos en pareja. Al día siguiente, hicimos oficial nuestra relación y todos se lo tomaron bien. Y con respecto a Elfman, él fue ingresado en una clínica mental para magos.

Las aventuras yuri de Lucy y Erza 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora