UN ALMA COMO PAGO.

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Esta historia es sin fines de lucro.

Los personajes de Candy Candy son propiedad de Mizuki e Igarashi.

Las imágenes fueron tomadas de la red. Créditos a sus creadores.

ONE SHOT by Liz Samame.

El frío de la noche hacia que la ecos en la Ventana crujieran mas y mas. Un hombre entre las sombras, tomaba una copa de vino mientras contemplaba a la mujer tendida en su lecho.. Tan bella, tan tentadora, tan perfecta, tan suya...una mezcla entre inocencia y lujuria que no podía ni el mismo controlar. Ahora que todo había pasado, un silencio hizo eco en su memoria rememorando una y otra vez su primer encuentro... Esa noche pensó: ha sido todo esto un sueño? Le había jugado una mala pasada su imaginación? No! no podía ser, él estaba seguro que no, aun sentía en su piel los besos, las caricias, los toques frenéticos y la desesperación con que su amada lo había marcado, dándole el mejor regalo que pudo haber deseado en toda su vida... Su entrega...

Terrence regreso al lecho saboreando lo que su mente tramaba para continuar con esa noche... porque si, esa noche aun no terminaba y seria la mas magnifica de todas... cuando su esencia se impregnara en ella, cuando los ecos de sus gemidos retumbaran en la habitación, cuando no quede ningún lugar en ese espacio donde no la halla tomado... a ella, a su adorada Candice. Todo lo que arriesgo, todo lo que enfrento, todo lo que SACRIFICO se veía reflejado en el gozo y el fervor que Candice le demostró cuando se entrego a él, porque sí, el se volvió su único dueño, el amo y señor de su voluntad, de su alma, de su cuerpo, de su deseo... si!!! Porque él y solo el despertaba en ella los mas bajos y lujuriosos deseos que hacían de esa dulce mujer la mas fiera y desenfrenada amante.

Poco a poco se fue acercando a ella, sus ojos sagaces y acechadores recorriendo enteramente ese cuerpo de pecado que lo hundía en el deseo mas oscuro y carnal... enredo su dedo en un rizo dorado y lo acerco a su nariz, percibiendo el olor a rosas mezclado con el sudor que emano su cuerpo al ser poseído por él unas horas atrás... despierta mi bella amada, despierta y deléitame con tu mirada esmeralda cargada de vigor y deseo le susurro al odio, pero mas importante cargada de todo tu amor, pensó solo para él.

Ella despertó y como si una fuerza inhumana la controlara, se colgó de su cuello besándolo frenéticamente, desesperada, como si de ese beso dependiera su vida entera, apretujo sus cabellos castaños, enredo sus piernas en su cintura y lo estrecho a su cuerpo para que sintiera como ese fuego que la quemaba por dentro, él también lo sintiera. Terrence abrazaba a esa mujer, su mujer, como si quisiera fundirla en el... poco a poco comenzó a regar besos por su cuello, hombros, bajando hasta sus pechos los cuales succiono y mordió a deleite, acaricio con su lengua cada rincón y cada parte del pecho y abdomen, pero cuando llego al triangulo adorado, un súbito estremecimiento lo recorrió, dándose cuenta que la mirada esmeralda de Candice seguía extasiada cada uno de sus movimientos, Azul verdoso y verde se encontraron mirándose fijamente la una a la otra, diciéndose en silencio mas... dame mas... necesito mas de ti.... Su lengua encontró el lugar preciso que hizo que Candice temblara en un placer máximo, mirándose fija y lujuriosamente Terrence lamio, beso y succiono la perla hinchada de placer, con sus manos recorría sus muslos, sus pechos y apretujaba sus nalgas para acercarla mas a su boca, haciéndola gemir y gritar, rogar por que no se detuviera y la llevara al máximo éxtasis carnal... una ultima succión basto para que Candice gritara su nombre y retumbara en todas las paredes de la habitación TERRYYYYYYYYYY oh mi amor!!!! Llegando al clímax; aun no terminaba de recuperarse cuando sintió como la jalaron al borde de la cama y sus piernas eran levantadas hacia los hombros del culpable de su estado de aturdimiento, de pronto sintió como de una sola acometida Terrence entraba en ella comenzando un vaivén duro y rápido, haciéndola sentir toda su longitud, haciéndola perder nuevamente el control, haciéndola sentir que se fundía con ese hombre viril y excitante, haciéndola sentirse mujer, su mujer. "MIA", "TODA MIA", lo escucho decir una y otra vez mientras la penetraba mas y mas duro cada vez, apretando sus caderas, recorriendo con sus manos sus piernas; se inclino para poder besarla y saborear el dulce sabor de sus labios, el néctar que lo hacia cada vez mas adicto a ella y que sabia no podría dejar jamás... succiono cada pezón y los lamio, solo eso basto para que Candice volviera a dejarse llevar por el clímax, contrayéndose y ordeñando el miembro de Terrence guiándolo al orgasmo, liberando su semilla en ella, llenándola y marcándola una vez mas como suya.

Como cada 31 de octubre de cada año, el reloj anunciaba la medianoche, todos en el salón de baile dejaron de danzar y voltearon expectantes a la escalinata principal, donde Terrence y Candice Duques de Grandchester hacían su aparición, el en un traje negro se veía totalmente seductor y elegante, expedia virilidad a cada paso; mientras ella envuelta en un hermoso vestido dorado, que resaltaba aun mas su belleza y un antifaz ribeteado con un brocado verde que daba una especie de fulgor a sus ojos, se veía extremadamente sensual y atrayente. Todos abrieron paso en el salón para que la pareja comenzara el vals, empezando este, con unas notas muy melancólicas pero que iban envolviendo uno a uno a los asistentes en una especie de hechizo que los hacia sentir volar. De pronto un súbito ventarrón arremetió en el salón abriendo de par en par las puertas principales, se escucho una escalofriante risa e hizo su aparición un hombre de negro, con un bastón que en la empuñadura tenia un lobo con dos rubíes como ojos. Se acerco lentamente y comenzó a revisar todo el salón, posando su fría y tétrica mirada en Terrence, en un pestañeo estuvo delante de el y dijo:

* HE VENIDO POR MI PAGO, ESTAS LISTO PARA PAGAR EL PRECIO?

*LO ESTOY, dijo Terrence pero debes saber IBLIS que..., el hombre de negro entrecerró los ojos y puso atención, ...que el pago que daré se encuentra en la habitación principal. Candice sonrió malévolamente y miro a Terry dándole un asentimiento sutil con la cabeza.

IBLIS conjuro: aliis speciebus y en ese momento los 3 aparecieron en la habitación donde una mujer pelirroja yacía colgada de los postes de la cama, inconsciente debido a la valeriana horas antes ingerida. Ella era el pago, su sangre fresca y lujuriosa, ella quien gustaba de retozar con cuanto hombre se le insinuaba, ella que vivía una vida desenfrenada y sin remordimientos, ella quien había llenado de dolor el pasado de la pareja junto a ella. Abre los ojos Eliza y déjame ver tu alma corrompida por el pecado, déjame ver todo lo que hiciste en mi nombre... IBLIS levanto el rostro de la chica y esta despertó de su sueño y miro en la mirada negra del hombre un conjunto de eventos que la hicieron sudar frio, la hicieron sentir todo el dolor y sufrimiento que había causado y estrujaron su alma y corazón hasta que este dejo de latir... Todo estaba preparado para el ritual, con paso decidido, Candice tomo la cuchilla de oro blanco, previamente colocada en la mesa de noche y la incrusto en el pecho de la joven pelirroja recogiendo la sangre de esta en una copa de plata de la cual bebió y dio de beber a Terrence quien luego de beber, beso sus labios con las mismas ansias con que le hacia el amor cada noche, sellando así el nuevo pacto, que cada año repetían; todo por seguir amándose en la eternidad.

FIN

ONE's SHOT's PARA HALLOWEENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora