~🌹 Rose Hood 🌹~ (Sonamy)

🌹~Capítulo 27 ~🌹

Pov narrador

En todo el reino, las conversaciones giraban en torno a la "gran boda" entre el Rey de Mobius y la Princesa Amelia de Athenas. La noticia de este matrimonio no solo uniría a dos personas, sino también a dos reinos enteros.

La gente del pueblo asumió que la razón por la cual el Rey Scourge rompió el tratado de paz con Athenas fue porque planeaba casarse con la princesa del reino vecino. Sin embargo, estaban completamente equivocados.

Mientras en el castillo, se llevaban a cabo los preparativos para la boda, en el calabozo, Sonic, el héroe del reino, estaba atrapado y lleno de ira.

"¡Debo salir de aquí!", gritó, golpeando furiosamente la reja de su celda.

"Tranquilízate, Sonic...", le aconsejó Sir Gawain, uno de los caballeros presentes.

"¿Cómo queréis que me calme si Amy se va a casar con ese bastardo?", exclamó Sonic, furioso por la situación.

"Debéis calmarse, Sir Lancelot de seguro tiene un plan...", sugirió Sir Percival, cruzando los brazos y apoyándose en la pared de la prisión.

"Espero que sí... tiene suerte de haber sido caballero de Athenas...", reflexionó Sir Gawain.

"Ahora que lo dices...", añadió Sir Percival. "Tiene razón... gracias a eso, la Reina de Athenas pudo salvar al menos a Sir Lancelot del calabozo y de las garras de Scourge... Solo esperemos a que él venga...", concluyó Sir Percival.

"Más le vale venir...", murmuró Sonic, golpeando la reja con frustración una vez más.

Mientras tanto en la habitación de la princesa estaba impregnada de un pesar profundo. Amy, con una expresión de preocupación, intentaba consolar a su madre, quien se encontraba sumida en la tristeza.

"Mamá, tú no tienes la culpa de nada...", murmuró Amy con dulzura, tratando de calmar el corazón afligido de su madre.

Entre sollozos, la reina de Athenas respondió, "Lo sé, mi niña... pero es que..." Las lágrimas le nublaban la vista, y era evidente que llevaba el peso de una decisión que le desgarraba el alma.

Amy rodeó a su madre con sus brazos, sintiendo el pesar de la responsabilidad que caía sobre sus hombros. "Madre, tranquila...", susurró, ofreciendo consuelo en silencio.

En ese momento, Silver, el hermano de Amy, entró en la habitación y se unió a la conversación. Su voz resonaba con determinación y amor fraternal.

"Hermana, no tienes por qué hacer esto...", afirmó con valentía. "Yo soy el siguiente en la línea de sucesión de Athenas, y haré todo lo que esté en mi poder para encontrar una manera de evitar que te cases con alguien a quien no amas."

Amy asintió, agradecida por el apoyo de su hermano, pero su mirada reflejaba la preocupación que la atormentaba.

"Gracias, hermano", dijo con voz temblorosa. "Pero él me amenazó diciendo que si no me casaba con él, os haría daño a vosotros. Y si algo les pasara a ustedes... yo... yo..." No pudo terminar la frase, y sus manos temblorosas cubrieron su rostro en un gesto de angustia.

Silver la abrazó con ternura, comprendiendo la terrible encrucijada en la que se encontraba su hermana. Juntos, enfrentaban un dilema que amenazaba no solo su felicidad, sino también la seguridad de su familia y su reino.

En la taberna de la Señora Vainilla, Rouge entró apresuradamente, con una expresión de incredulidad en el rostro.

"No lo puedo creer", exclamó, captando la atención de los presentes en la taberna.

La camarera, sin comprender del todo la situación, preguntó, "¿Qué es, señorita Rouge?"

"¿Todavía no te has enterado?", respondió Rouge con impaciencia antes de tomar a Cream por los hombros. "Amy se va a casar con el Rey Scourge", dijo, sacudiéndola ligeramente.