One

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Sus manos temblaban sosteniendo la cámara de fotos, apuntando directamente a la calle y esperando que el hombre saliera.

Volteó para ver a su lado, donde a varios metros de distancia Wanda Maximoff se encontraba encubierta mientras la vigilaba, siendo vistas por el resto del equipo desde varios puntos escondidos.

Se ocultó más si se podía en su capucha, volviendo a su pose anterior cuando vió al hombre que debía fotografiar salir de la calle antes dicha; tomando de una vez su cámara.

Su seño se frunció al notar a alguien más junto a él, de un aspecto un tanto robusto y algo mayor para su físico.

—¿Quién está junto a él?—preguntó Steve por el intercomunicador, pasando su vista por la calle desde el edificio donde se hallaba oculto.

No logro verlo—Wanda observó a la pelinegra siendo lo más discreta que podía, notando sus ojos abrirse como platos.

Lilith sintió el terror inundar todo su cuerpo de pies a cabeza, y sumando su desesperación y deseos de venganza y sobretodo sufrimiento al igual que con un par de lágrimas queriendo escapar de sus ojos comenzó a correr detrás de la camioneta como si su vida dependiera de eso, siendo llamada a gritos por sus compañeros de equipo.

Se retiró los guantes con brusquedad para posteriormente dejar salir su poder a flote, pero en vez de darle al conductor para chocar el vehículo solo logró que la mitad de la ciudad fuese sumergido en sus peores pesadillas, escuchándolos gritar y llorar de desesperación.

Cuando esos fríos ojos la vieron por el espejo retrovisor algo logró removerse en su estómago, y todo su enojo pasó a ser miedo de un segundo a otro.
Quedó de rodillas en mitad de la calle, con lágrimas descendiendo por sus mejillas y abrazándose así misma mientras dejaba salir sollozos involuntarios, sintiendo la culpa comenzar a carcomerla al escuchar los llantos de niños que luchaban por escapar de sus pesadillas.

La Maximoff se agachó y la abrazó sin decir nada, y ella no hizo más que seguir llorando mientras sentía el calor de su única amiga reconfortarla poco a poco.

—Hay que ir a la torre...

(…)

—¿¡Tienes idea de lo hiciste ahí, niña!?—Tony Stark no podría estar más inquieto, teniendo en cuenta que apenas durmió la noche anterior—¡Tuve que dar la cara por ti y pagar la asesoría psicológica para los niños!

Lilith Clifford sin embargo era otro tema, su mente viajaba a los maltratos que vivió cuando era solamente una niña pequeña mientras que su cuerpo no parecía responder a los llamados que los demás le proporcionaban.
Aún quedaban lágrimas pegadas a sus mejillas y su pequeña nariz estaba levemente rojiza; y la única manera de que no atacara al multimillonario con sus poderes eran las caricias que Wanda Maximoff le proporcionaba en su mano por debajo de la mesa.

—¿Siquiera me estás escuchando?

—Dejala tranquila, Stark—la castaña salió en defensa de la chica, resaltando su acento—Me aseguraré de que no vuelva a suceder.

—Eso esperamos, Wanda. Porque si vuelve a suceder no tendremos otra solución más que enviarla a la balsa—Steve vió seriamente a la pelinegra, y esta solo pudo dar un leve movimiento de cabeza antes de levantarse y salir, siendo seguida por su única amiga en el cuartel Vengadores.

—Lilith, espera...-

—¿Soy un peligro?—se detuvo a mitad del camino para verla con los ojos llorosos, removiendo algo en el interior de la Bruja Escarlata.

°CONTROL° (Wanda Maximoff) #Marvelawards.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora