Capítulo 6.

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-¡Jimin!.... ¡Jimin, por favor, espera! –Gritaba Adriana mientras corría, detrás del liceísta de beige que se había levantado molesto del banco y la había dejado sola.

Ni siquiera la dejó explicarse, se dejó llevar por sus impulsos salvajes y no esperó que ella terminara de hablar.

Jimin caminaba enojado, a paso veloz, ignorando sus incontables llamados. Hasta que fue halado de regreso por su codo.

-Jimin, ya va, ¿Por qué te pones así? –Preguntó ya al quedar frente a él, y no hacía falta decir que su mirada era más que insultante y dolorosa. Hace un momento estaba bien, de sonrisas a risitas, ¿Tan malo había sido el favor que le había pedido?- Jimin...

-¿Te gusta Yoongi? –Jimin no espero más tiempo y quiso matar sus dudas, sin pelos en la lengua. Adriana frunció el ceño, confundida- Respóndeme, ¿Te gusta mi amigo, cierto? Por eso es que estás conmigo, para acercarte a él.

-Jimin ¡No! Eso no es así. Mira, lo que pasa es que...

-Lo que pasa es que soy lo bastante iluso para creer que una chamita como tú me pararía bolas a mi ¿Cierto? –La interrumpió, más molesto que antes. Jimin se sentía demasiado imbécil, demasiado idiota. Las señales habían sido claras, todo pasaba de manera tan linda que tuvo que haber supuesto desde un principio que había sido un engaño.

Ella había aceptado salir con él porque le causaba lastima rechazarlo. Y para patear más su corazón, le gustaba uno de sus mejores amigos. Yoongi.

Jimin estaba cegado por su rabia y dolor, una combinación terrible que podía matar cualquier sentimiento. Y Adriana se sentía desorientada. Quería hablar y contradecirle, explicarle lo que realmente significaba "su favor", pero las palabras de él la habían dejado tan hueca que no sabía cómo articular palabra.

¿Qué le gustaba Yoongi? ¿En qué clase de realidad o fanfic de Wattpad aquello podía ser posible?

Adriana estaba tardando demasiado y Jimin, en medio de su colapso, no tenía paciencia, ni ganas para esperar un segundo más frente a esa chama.

La primera chica de beige a la que se iba a arriesgar en entregar su corazón.

-Hazme un favor, chamita, no me hables. Y si me ves, circula y no te me acerques –Jimin no era un grosero, jamás lo fue con ninguna mujer, al menos a tal grado de gravedad. Pero, sabía que si seguía así con Adriana, tiraría su caballerosidad por un barranco, junto con ella.

Dio vuelta y retomó su camino, dejando nuevamente a Adriana sola con la palabra en la boca.

¿Qué si la había cagado? ¡Claro que la había cagado! Pero, en la cabeza de Jimin, esta vez, no era su culpa.

-¿Jimin? ¿Qué pasó? –Preguntó Hoseok al verlo, pasar de largo por la mesa en donde estaban, sin intenciones de voltear. Conocían bien a Jimin, sabían que cuando el menor tenia las cejas juntas y la mandíbula apretada, era porque había pasado algo grave.

Jungkook y Hoseok se miraron entre sí, para que al final fuera este último en bajarse de la mesa y decidiera ir a socorrer a su amigo. Jin y Namjoon también observaron la escena, confundidos y con curiosidad por saber lo que pasó.

-¿Sera que peleó con Adriana? –Preguntó Jin al ver la dirección por donde Hoseok se había ido a perseguir a Jimin.

Namjoon se hundió de hombros.

-Quizás... pero, es mejor no meterse en esos peos.

-Tal vez lo dejó con el webo parao' –Se burló Jungkook, ganándose una mirada no amigable de la mamá pato del grupo, Jin- Es una posibilidad... -Alzó las manos, hundiéndose de hombros- o ¿No? –Señaló a Namjoon.

📓5To B✏️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora