パート2

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El tesoro de Jackson

Parte dos

Una de las cosas que más amo de Mark son sus labios, sus preciosos labios rosados naturalmente, tan suaves y divinos

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Una de las cosas que más amo de Mark son sus labios, sus preciosos labios rosados naturalmente, tan suaves y divinos. Por ello, una vez que empiezo a besarlos, no puedo detenerme porque aquellos belfos echizan mis sentidos para no poder soltarlos, y es que besarlo es tan adictivo que enciende las mariposas dentro de mi estómago, el cosquilleo siempre se hace presente cuando hago contacto físico con él, pero nunca se lo he dicho realmente porque siento que me vería como un tonto, pero bueno, ¿Qué puedo decir? Soy el tonto de Mark. De este hombre que ahora se encuentra sentado en mi regazo besando mis labios como se le entra en gana, no puedo evitar pegarlo a mi mucho más abrazando su delgada cintura, el calor de su cuerpo contra el mío me da una cálida sensación de paz.

Siento cómo se retuerce con desesperación por más contacto, porque quiere que lo toque de formas y en lugares poco decentes. Ya no puedo sentir sus labios, se han apartado de los míos. ¡Demonios! Está besando mi cuello, amo que haga eso porque sé que dejará una bonita marca de que le pertenezco. Pero no me quedo quieto, también quiero hacerlo, también quiero dejarle marcas rojas en su hermoso y blanquecino cuello. No espero ni un segundo más, lo aparto para comenzar ahora yo con la ronda de besos desde su mentón hasta donde quiero dejar mi marca de amor.

Él no me detiene, solo ríe bajito porque le hago cosquillas, su voz, ¡Cielo santo! Su voz es una melodía divina de los ángeles, adoro escuchar cada una de sus palabras, cada uno de sus gemidos y risas. Yo adoro todo de Mark.

— Amor, ya basta, eso hace cosquillas. — Dice riendo, posteriormente, intentando apartarme en un bobo intento ya que sus brazos no tienen la fuerza suficiente para apartarme. Sus manos las deja libremente acariciar mi cabello, amo que me acaricie con sus frías manos, no podría pedir más que eso. — Oye, si sigues haciendo eso te castigaré.

Oh, estas retandome Mark Tuan.

— Mmm, ¿Ah sí? ¿Y qué castigo me pondrías? — Cuestiono incrédulo. Mark me mira de arriba hacia abajo descaradamente, tal vez pensando en miles de perversidades que esconde en su mente, sus ojos me recorren lentamente como si con tan solo su mirada pudiera comerme y al detener su vista en mis ojos se muerde el labio inferior con fervor, ¿En qué estas pensando, niño travieso? No puedo evitar sentirme cohibido por la cercanía de sus labios en mi oreja derecha.

— Te lo chupare y no dejaré que me toq... — Le tapo la boca con rapidez y él se queja frunciendo el ceño. Bam Bam venía entrando, se nos quedó mirando extraño por la posición en la que estábamos.

— Oigan, si van a tener sexo, no en mi casa, idiotas. Ya traje las cervezas. — Dice como advertencia, claro, con falsa desconfianza. Mark y yo reímos ante las palabras de Bam Bam. — No es gracioso idiotas, además no coman delante de los pobres. — Se cruza de brazos como un niño pequeño, hace un tierno mohín, está chiquito.

— No es nuestra culpa que hayas desperdiciado esa oportunidad. — Insinúa Mark como burla, Bam Bam le tira un cojín de encima del sillón, pero aún así Mark no deja de reír. Me emboba verlo reír de esa manera, sus ojitos se arrugan cuando ríe o sonríe, es tan tierno, todo lo contrario al Mark que conocí en primer lugar, ese era frío y callado, pero poco tímido, se demostraba fuerte y rudo. La verdad es que nunca pensé que me podría enamorar tanto de una sonrisa, pues él tiene la más bella de este planeta.

— Ya deja de reírte de las desgracias de los demás y mejor bebamos. — Finaliza Bam Bam sacando unas cervezas que luego nos da. Mark se levanta y se sienta en la alfombra, de pronto ya no siento su peso en mi regazo, ese que adoro sentir, pero bueno, lo importante es que él esté cómodo. Lo veo sonreír mientras habla con Bam Bam de cosas tontas, me pregunto si me veré como un acosador mirándolo casi todo el tiempo, me pregunto si le molestará que lo vea casi todo el tiempo. No puedo evitarlo, podría admirar su belleza a todo momento y nunca me cansaría de ello.

Aparto la mirada, tal vez me paso a veces.

𖠚ᐝ

Los labios de Mark son mi dulce favorito

Jackson Wang; ;;;

Choi Michel 𖠚ᐝ

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