❝Dulce Espera❞ ➛ Hyungwonho

↳ ׂׂૢ༘ 「Fifth Month」

Hyungwon cree que llorará de felicidad con tan sólo ver lo mucho que su retoño está creciendo, y de tristeza por la poca ropa que tiene para ponerse puesto que ya no entra en algunas.

Su camiseta favorita, que antes le quedaba holgada, ahora le aprieta el estómago mientras están de visita en la casa de los padres de Hoseok.

En la sala, acompañados de unos cuantos bocadillos, no paran de hablar del futuro nuevo miembro de la familia. Según su suegra va a ser un niño y la pareja no tiene idea de como lo intuye.

—Por la forma de tu vientre—dice la señora Lee y ellos la miran algo confundidos, haciendo que ella ría—, mi instinto maternal me lo dice.

—Oh, un pequeño niño—Hyungwon sonríe, mirando a Hoseok con emoción—. Sería un mini Hoseok.

—O un mini Hyungwon —señala, acariciando su mano posada en su panza—. Y si fuera niña, sería igual de hermosa.

Todos esperan con ansias que el bebé nazca, hasta Hyungwon cree que sus familias lo esperan mucho más que ellos. Las preparaciones van tomando forma, ya han comprado un par de cosas como su cuna y algunos muebles, y han ido decorando con el paso de los días.

Su mamá y su suegra también han andado con planes de hacerle un baby shower a Hyungwon, pero él se negó porque sinceramente no le gustan para nada y no quiere verse ridículo cuando un payaso lo saque a bailar o hagan juegos de quien se pone el pañal gigante primero. Hoseok también lo pensaba, pero como excusa puso que se haría lo que Hyungwon desee.

Al final llegaron a un acuerdo, diciendo que al menos harían una linda entrega de regalos y Hyungwon accedió.

—Finalmente tu mamá y yo pudimos acabar las tarjetas para el baby shower.

—No es un baby shower, mamá.

—¡Shh! Ten, Hyungwon —le pasa unas tarjetas sacadas de su bolso—. ¿Qué te parecen?

—Ow, están muy bonitas, pero no era necesario.

—Claro que sí. Te voy a dar algunas para que se las des a los chicos luego, enseguida vuelvo—se levanta del sillón y se dirige a su habitación.

Cuando ya parece que están solos, Hyungwon se tira sobre su espalda y suelta un chillido que sobresalta a Hoseok.

—¿Estás bien, bebé?—le pregunta, rodeando su cintura con un brazo mientras que posa la otra sobre su estómago abultado.

—Hoseok, me duelen mucho los pies—dice, sobándose la espalda como puede—, y acá atrás también. 

—¿Por qué no dijiste nada?

—No quiero que nos vayamos y seamos descortés con tu mamá.

—Tranquilo, ella lo entenderá. Nos da las tarjetas y luego nos vamos.

Hyungwon sólo asiente, mirándolo con ojos de cachorro mientras sigue tirado en el sofá.

—Descansaremos un poco, ¿sí? Te haré unos masajes para que te sientas mejor cuando lleguemos a casa—le deja un beso en la frente y lo abraza delicadamente.

—Te lo agradecería, Hoseok.

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Luego de haber recibido las tarjetas y de haberse despedido de la mamá de Hoseok, regresan a su hogar rápidamente.

Al llegar, Hyungwon no duda en tirarse a su cama de un movimiento, intenta sacarse las zapatillas con dificultad y después recuerda que ya no puede hacerlo por el tamaño de su panza.

—Seok, ayuda... —lo llama un poco avergonzado, pero este no duda en ir a su lado.

—Pobre de mi bebé grande—ríe mientras se agacha y Hyungwon pone un pie y luego otro en su rodilla flexionada—. Listo. ¿Te sientes mejor?

Hyungwon suelta un sonido de placer cuando empieza a estirar sus pies—. Mucho, mucho. Gracias, amor.

—Hay que cambiarte. Vamos, alza los brazos.

No importa cuantas veces Hoseok haya cambiado a Hyungwon en las últimas semanas, él siempre se avergüenza un poco.

—Mmm, Seok , mira—señala su estómago, justo en donde debería estar su ombligo—. Ya no tengo ombligo.

Hoseok ríe y luego cierra el cajón de donde sacó una camiseta—. Volverá cuando nuestro cielito nazca—se acerca y se la coloca, sonriendo por lo tierno que se ve su novio en amarillo—. Qué lindo patito eres—picotea sus labios con ternura y Hyungwon suelta un suspiro, sonriendo de lado.

Una media hora después, Hoseok sale del baño ya aseado y cambiado, justo a tiempo para escuchar el gritito de felicidad de Hyungwon.

—¡Seok, ven, ven!—grita emocionado, su cuerpo está recostado en el respaldar de la gran cama.

Hoseok se le acerca casi corriendo, sentándose en frente y mirándolo preocupado.

—Pon tu mano aquí, rápido—le dice, tomando su mano y colocándola en la parte derecha de su vientre, lo observa—. ¿Lo sientes?

Y Hoseok lo hace, siente los pequeños movimientos de su bebé, pequeñas pataditas. No tiene palabras para describir lo fascinado que está su corazón, así que sólo se limita a observar su vientre entretanto lo acaricia.

—¿Te duele, Wonnie?—le pregunta.

—No, pero se siente raro—ríe y levanta la mirada de la mano sobre su estómago—. Hoseok, ¿estás llorando?—pregunta de vuelta con una ceja alzada.

—No—dice, pero claramente intenta tragarse sus lágrimas.

—Eres un tonto—Hyungwon lo abraza a él unos segundos, antes de que Hoseok recueste su rostro sobre su panza delicadamente. Le acaricia los cabellos y uno de sus hombros con cariño—. Te amo, mi amor.

—Te amo también, Hyungwonnie —dice, enderezándose y sonriéndole con un brillo inigualable—Y a nuestro cielito.

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╰►wonniegombomnito ♡