IX

6 1 0
                                    

Tú no eres el único ángel que conocía, mi amor.

Había alguien más, alguien que yo ansiaba que conocieras.

Alguien que descendió de los cielos a acompañarnos en nuestro camino.

Me hacía muy felices que se llevaran bien. 

Siendo ángeles, nada había de pasar.

Los ángeles también sangranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora