Escucho un dulce sonar proveniente de mi teléfono el cual es mi horrible despertador sacándome de mi precioso sueño. Miro hacia mi reloj y maldigo el haberme quedado hasta tarde terminando un estúpido error hecho por gente incompetente, tenia un sueño que no podía conmigo misma.
Siendo las 6:30 de la mañana apago el despertador y aun con los ojos cerrados me levanto pesadamente de mi cómoda y calentita cama, arrastro los pies por el suelo hasta llegar al baño para darme una rápida ducha, cuando termino cepillo mis dientes y me cambio con unos ajustados pantalones principe de gales tiro alto y una blusa manga larga negra señida a mi cuerpo dándole su precioso toque con unas hombreras que la hacían destacar, escojo mis stiletto de charol negro con suela roja favoritos y arreglo mi rubio cabello lacio en una coleta muy alta, como toque final coloco corrector en mis pobres ojeras pronunciadas, cepillo mis cejas marcadas, delineo mis ojos azules y pongo labial rojo mate en mis carosos labios.
Bajo a desayunar, como todas las mañana mi mama me espera con una taza de café con leche y tostadas, no me di cuenta que tenía tanta hambre hasta que las vi.
-Hola ma-le doy un beso en la mejilla y me siento para comezar a comer-
-Hola Hija, como amaneciste hoy??-me pregunta mientras se sienta frente mío con una taza de café en sus manos-
Mmmm Con el mismo humor de siempre- le sonrió mostrando todos mis dientes- No se me va a quitar nunca-
-Suspira- Sos igual a tu padre.-
- Me rio y asiento tenía razón era igual a mi papa el también tiene un humor horrible en las mañanas- Ma, me retiro que voy a llegar tarde al trabajo-
-Yo ire mas tarde mi cielo, almorzamos juntas?-Me dijo antes de que saliera de la cocina-
-Te aviso! Veo como estoy de atareada-
-Okey, cuidate- escuche que me gritaba antes de subir a mi habitación para recoger mis cosas-
Antes de salir reviso mi aspecto una vez mas sintiendo que le faltaba algo a mi outfit, de camino a la salida me coloco unos pendientes de argolla y mis gafas de sol aviador Ray Ban. Con mi bolso en mano junto a los papeles que estuve corrigiendo la noche anterior saludo a Henry el chofer familiar quien me abrió la puerta trasera para que pudiera entrar al auto, de camino al trabajo voy mirando por la ventanilla aburrida contado los arboles que pasan, sentí una sensación acumularse en mi pecho, agobio y desesperación de salir corriendo de esta rutina interminablemente aburrida que sofocaba mi mente, como desearía tomar mi motocicleta y dejar que todo este protocolo se vaya al caño junto a esta careta de mujer perfecta.
-Llegamos señorita, que tenga un buen dia-Dice Henry sacándome de mis pensamientos JA como si eso fuera posible, que irónico dice "tenga un buen día " cuando esto es una cárcel, pobre no lo culpo es su trabajo.
-Gracias Henry, igualmente!- le respondo tomando la manija de la puerta
-La paso a buscar a la salida señorita?- me pregunta
-Le aviso, capas me vaya con mi madre- le contesto mientras me bajo del auto
Subiendo las escaleras de mármol blanco hasta las inmensas puertas de vidrio que se abren al seguir de mis pasos por dos porteros que me saludan amablemente, voy directo al ascensor al cual me subo completamente sola ya que odio tener gente a mi alrededor en un espacio tan reducido, pero mis empleados ya lo saben y niegan rotundamente la entrada al resto de las personas que se quieren subir, presiono el botón del piso quincuagésimo mientras escucho la música clásica que resuena a mi alrededor y corroboro en el reflejo del espejo que todo esta en orden, al abrirse las puertas sigo mi camino hacia mi despacho y en el camino mi secretaria se acerca como todas las mañanas a darme el parte diario, las reuniones y los encargo que le pedi mientras me sigue apresurada.
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Hasta que el destino nos unio
Teen FictionShareen Hepzibah conocida por ser la famosa mafiosa de las carreras de motos, es desafiada a perderlo todo por un simple capricho, esta es la historia de la peligrosa doble vida de Angel Black/Black Demon, cuyo odio ferviente hacía los hombres causa...