( CAP 4 ) A solas.

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*ITACHI*

Tras haber hablado con Neji en su ''habitación'', fuimos al salón donde estaban algunos de los sirvientes y sirvientas del castillo, Neji se colocó junto a ellos, lo cual a mí no me hizo demasiada gracia, pero como es su decisión he de aceptarla. De repente el ruido de la puerta nos alertó a todos, el rey Hizashi y mis padres habían vuelto.

-Tengo algo que comunicaros a todos (dijo el rey a sus sirvientes). El príncipe Itachi se quedará unos meses con nosotros, y... ¡Neji!

-S-si, su majestad.

-Te harás cargo del príncipe, y como me llegue a enterar de que hallas hecho algo mal...(dijo el rey cogiendo a Neji del cuello, en ese momento quise intervenir, pero la mirada que Neji me dio no me dejo hacer nada y me tuve que quedar callado) ...te las verás conmigo, ¿¡Entendido!?.

-S-si mi señor.

-Bien, ahora enséñale al príncipe su dormitorio.

-Vamos, su alteza (dijo).

-De acuerdo.

Neji me acompañó hasta una habitación enorme, llena de lujos, combinando colores morados con blancos. Por lo que él me había comentado en el trayecto desde el salón hasta aquí, mi habitación estaba el en ala de sirvientes, ya que era para invitados, a lo cuál yo me sorprendí agradecí desde el fondo de mi alma porque no quería estar en la principal con Hiashi y sus hija Hinata .

-Oye Neji, ¿todas las habitaciones de este ala son todas iguales?

-¿Estas de broma? Claro que no, las de los sirvientes son muchísimo menos lujosas, después de todo, somos sirvientes...(dijo con un aura de tristeza).

-Pero tú eres el sobrino del rey ¿no? ¿Porque tú duermes en un desván y ellos en habitaciones? Haber ellos también se merecen una habitación decente, son personas, pero no entiendo porqué tu tío te hace todo eso...

-Realmente no lo sé pero a todos nos trata igual no es que él sea un rey bueno y bondadoso a ojos de todos los trabajadores del castillo.

-¿Y por qué no hacéis nada?

-¿Que podríamos hacer nosotros? Tan solo somos unos sirvientes sin poder alguno, ¿Que harías tú en nuestra situación?

-Pues no lo sé...

-Entonce...

-Pero si sé que en mi castillo no se trata con indiferencia a nuestros sirvientes, les pagamos bien y duermen en habitaciones mucho más decentes que estás.

-¿Que insinúa?

-Pues... Que... Si queréis podéis venir a mi castillo cuando sea rey, os haré hueco a todos, os pagaré, y...

-¿Queréis?

-Si tú también, bueno a trabajar no pero si quieres puedes venir cuando quieras, mis puertas siempre estarán abiertas para tí.

-Bueno... Tal vez vaya el día que mi tío me deje salir, en el futuro claro, pero no te hagas ilusiones.

Con eso último mi corazón empezó a latir cada ver más rápido, no sabía por qué cada vez que estaba con Neji me sentía en paz, como si no hubiera nadie más, tal vez me había enamorado de Neji y por eso cuando me dijo esas últimas palabras fui capaz de imaginar un montón de momentos felices junto a él, en el futuro claro, pero en un futuro próximo.

-Claro, cuando quieras...



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