- Natalia !!!!! Natalia !!!! -corrí hasta ella colocándome de rodilla justo delante- Nat .... Nat despierta Nat ... Nat .... Nat .... Nat
Sentía la voz de Alba llamándome mientras volvía a recobrar la consciencia y es que la ostia había sido para haber se matado como quien dice, quejándome por el golpe me levante con ayuda de una Alba que me miraba sorprendida al verme en su boda después de haberle dicho que me volvía a Madrid.
- Nat -me llamo para que la mirara- ¿Qué haces aquí?
- Se me ha olvidado decirte algo como dama de honor principal -me miro extrañada- no te lo he dicho pero entre tu peinado y esa banda escocesa que te han puesto pareces mi abuela siento no haberte dicho que no te quedaba bien
- Pero que dices Nat
- Sabes una cosa por primera vez quiero contarte la verdad -le agarre las manos- hubo una vez hace mucho tiempo que bese una noche a una chica sin saber que lo estaba haciendo con la que seria el amor de mi vida -me miro sorprendida- te amo Albi lo hago desde el primer día en que te vi y por mucho que pase el tiempo no voy a dejar de hacerlo
- Alocada pequeña Lacunza siempre escoges el peor momento -negó sonriendo-
Sabéis esa sensación de la que hablan las películas que da la sensación de que todo lo que tienes alrededor desaparece en cuanto tus labios se juntan a los de la persona que quieres pues eso me paso a mi cuando Alba se lanzo a besarme que solo éramos ella y yo sin nadie mas a nuestro alrededor, asi que no fue hasta que abrí los ojos que vi lo que en realidad se nos venía encima y es que todo lo bueno tiene su fin.
- Joan lo siento mucho -me acerque a él y cogiendo su mano deje el añillo de pedida sobre ella- se que después de esto a lo mejor no me puedes perdonar pero solo quiero decirte que eres perfecto y que cualquier mujer estaría encantada de estar contigo pero yo no puedo hacerlo porque nos estaría engañando y no quiero hacerte daño.
- Adiós Albi
Según lo dijo se acerco a darme un beso en la mejilla y se dio media vuela con intención de irse, pero no todo iba ir tan bien ni todo iba a ser tan comprensible y no fue hasta que vi a la hermana de Joan que comprendí que ella iba hacer lo que su hermano no podía.
- Cariño, ¿Hazle aprender que con nosotros no se mete nadie? -dijo la madre de Joan alentando a su hija a que le hiciera caso-
- Con mucho guato mama -sonrió cínicamente mirando a Natalia-
Y ahí fue cuando sentí el puñetazo justo en mi cara y ya os digo yo que me dio con todas las ganas porque pensé literalmente que me había arrancado la mandíbula, es más no supe que lo tenía todo bien colocado hasta que Alba me acaricio la mejilla.
- Nat ¿Estas bien?
- Si no pasa nada supongo que me lo merecía -sonreí restándole importancia- ahora creo que a llegado la hora de volver a casa ¿Te vienes con conmigo Albi?
- Sabes que la respuesta es si en todas sus variantes creo que no te dejare escapar vas a tener que aguantarme mucho tiempo -mire a mi madre- mama nos volvemos a casa aunque por tu cara diría que ya sabias que esto podía pasar
- Anda tu te debes de pensar que yo soy tonta ya sabía yo que esta muchacha -miro a Natalia- terminaría viniendo y ahora vámonos que la humedad que hay aquí me esta matando en los huesos y eso no puede ser bueno para nadie.
- A ti no se te escapa una mamá -dije con cara de sorprendida-
- Es que una madre se da cuenta de todo eso y más -mi madre sonrió- no pongas esa cara cariño si hasta tu padre que en paz descanse lo sabía y ese si que nunca se enteraba de nada
La verdad es que entre risas nos fuimos de allí no tardando en recoger todas nuestras pertenencias de casa de Joan para irnos a un hotel a pasar unos días hasta que pudiéramos encontrar un avión que nos llevara de vuelta a Madrid, algo que no llevo unos cinco días ya que no encontramos un vuelo que saliera antes.
Narra Natalia
Al fin ya habíamos llegado a Madrid aún no me creía que Alba hubiera decidido quedarse conmigo, desde que habíamos bajado del avión no nos habíamos separado llevaba toda la tarde conmigo viendo películas en el sofá y eso era algo que aún hacía que me pellizcara de vez en cuando para comprobar que no estaba soñando.
- Si sigues mirándome así me vas a desgastar Natinat -rio tarándome un cojín a la cabeza- Nat basta ya por favor me pones nerviosa
- Ay Albi -suspire sonoramente- es que no puedo evitarlo estas aquí justo a mi lado y aún no me lo creo yo pensé que esto nunca iba a pasar
- Pues empieza a creértelo porque no me pienso mover de aquí mientras tu me dejes estar cerca tuyo -me dio un beso en los labios- y ahora porque no me preparas algo de cenar que me muero de hambre
- Que cara tienes tú -reí negando con la cabeza- tu sólo me quieres para que te haga la cena será posible - me intente levantar pero me agarro volviendo a caer en el sofá-
- Sabes de sobra que yo te quiero para muchas cosas más -sonrió pícaramente- pero ahora tenemos que cenar para coger fuerzas va a ser una noche muy larga
Esta vez fui yo la que se acerco a darle un beso en los labios que se prolongo más de lo esperado para después levantarme e ir hacía la cocina, ahora podía decir que al fin había encontrado el camino correcto ese que llamaban felicidad y es que Alba era eso mi propia felicidad el lugar donde quería estar y no escapar nunca más.
ESTÁS LEYENDO
La boda de Alba (Albalia)
Fanfic"No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes" eso fue lo que le pasó a Natlia cuando vio que Alba se casaba ¿podrá la morena cambiar el destino? Adaptación de película "La boda de mi novia"