Sentencia

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Milk revolvió la leche en la cacerola mientras veía cocinarse poco a poco el tocino en la sarten, ella lo tenia que admitir, sentía que era una mañana maravillosa que jamas pensó volver a vivir. El olor de la leche entibiándose siempre le gusto de pequeña, le recordaba un poco a su madre, a su niñez, a su futuro como princesa, y era uno de los pocos alimentos que no le recordaban a Goku.

La pelinegra apago la estufa y tapo la sarten después de unos minutos mientras veía la masa que tomaba temperatura sobre la mesa. Un bostezo se hizo presente en ella y estiro sus brazos mientras arqueaba la espalda para despabilar definitivamente todo su cuerpo. Pero sus planes se frustraron por completo cuando un par de manos ingresaron desde su cintura desnuda hasta sus pechos bajo el pequeño corpiño deportivo y se apretaron allí.

- ¿Por qué despertaste tan temprano?- Black pregunto mirando al desastre en la mesa, es decir, un desastre bastante apetecible.

- Imagine que como es el ultimo día antes de la ultima pelea, tendríamos que entrenar un poco.- Milk expreso y se sobresalto cuando él solo la empujo sin despegarse de su cuerpo hasta acostarla boca abajo contra la mesa llena de harina.- vas a arruinar el desayuno y voy a acabar con la cara llena de harina.

- No te importo mucho que te manchara anoche...- Black respondió lascivamente sacando sus manos de los pechos redondos de la mujer.- ¿Donde está el mayordomo?

- Fue llamado por los dioses, o algo así.- Milk contesto y sintio las manos del zama recorriendo el camino de su cintura hasta sus caderas.

- Es una lastima, quería incomodarlo dándote un poco de placer.- Black tomo los bordes del pantalón negro de Milk y los bajo junto a su ropa interior.- Pero lo guardaremos para esta noche.

- Creo que te vas a arrepentir de desayunar tarde.- Milk menciono mirando a la puerta de la cocina.

Black no contesto por unos segundos, lo que hizo que ella intentara incorporarse, pero la mano de él volvió a acostarla contra la mesa.

- No seas impaciente mujer, aun estoy molesto por que dejaste que ese mono sucio te besara.- la mano libre del zama bajo hasta la entrada de Milk y la acaricio con las yemas de los dedos sacandole varios suspiros.- Se supone que debías defenderte.

- Se supone que tenias que defenderme.- Milk refuto sin pensar con claridad, él era demasiado buena para hacerle perder la cabeza cuando la tocaba.

- Soy él que pone las reglas aquí, si alguien mas te toca, yo voy a desquitarme contigo.- Black expreso sintiendo como ella comenzaba a humedecerse.- Y lo voy a hacer de este modo, ¿No te parece un castigo piadoso?.

- Bastante...- Milk mascullo sintiendo la tensión creciente en sus pechos y su intimidad.

- Perfecto, eso me da un punto.- Black se separo un poco de ella y desato su cinturón rojo.

Toshiro ingreso a la cocina con una carta en la mano y se quedo inmóvil viendo la escena. Milk se volvió completamente roja y trato de volver a incorporarse pero Black volvió a sostenerla allí.

- a menos que tengas la intención de participar con nosotros, te sugiero que cierres la puerta y te vayas.- Black expreso con un rostro serio mientras sostenía la espalda de Milk firme contra la mesa y con la otra liberaba su erección.

El mayordomo giro con la carta en la mano y se puso de espaldas a ellos.

- El Daishinkan y el participante Goku están aquí.- Toshiro menciono.- Los hice pasar a la sala contigua, le sugeriría no hacer mucho ruido.

El mayordomo salio tranquilamente de la cocina y Black se quedo con una sonrisa enorme en el rostro.

- Creo que dijo que te haga gritar.- Black se inclino mas cerca de Milk.- Veamos si te puedes contener mucho.

BlindajeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora